Buscan a Esther Dingley, una británica desaparecida en Pirineos tras seis años recorriendo Europa


La Guardia Civil y la Gendarmería francesa buscan a la joven desde el pasado jueves
Llevaba un mes viajando en solitario tras recorrer Europa con su pareja desde 2014
A la británica Esther Dingley, de 37 años, se le perdió el rastro el pasado 22 de noviembre. Ese día se encontraba en el Pico Salvaguardia y, según le contó a su pareja por Whatsapp, regresaría el 25 a Benasque, en Huesca, tras realizar una ruta de senderismo circular entre España y Francia. Pero nunca regresó. Dingley llevaba un mes viajando en solitario, después de seis años recorriendo Europa en autocaravana con su novio, Dan Colegate, de 38 años, y sus perros. Ambos tienen un blog, Esther y Dan, donde detallan todas sus aventuras.
La Guardia Civil y la Gendarmería francesa buscan a la joven y han facilitado su descripción: mide 1,70 metros, pesa 60 kilos, tiene el pelo rubio, largo y liso, y los ojos castaños. La última vez que se le vio vestía una camiseta de manga corta, mallas negras y botas de montaña.
Los agentes hallaron el vehículo de la mujer aparcado en Benasque y desde el día 26 de noviembre participan en las labores de búsqueda especialistas del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de Benasque y la Unidad Aérea de Huesca en coordinación con equipos del Pelotón de Gendarmería de Alta Montaña de Bagnéres de Luchon (Francia) y otro helicóptero de ese cuerpo.
Seis años recorriendo Europa
Esther y Dan llevan juntos desde los 18 años. Ambos vivían en Durham (Reino Unido) y, en 2014, tras una infección que casi le cuesta la vida a Dan, decidieron alquilar su piso y tomarse un año sabático para recorrer el continente. Pero la aventura se ha alargado hasta ahora. Hace unas semanas, la pareja apareció en un artículo de la BBC contando su periplo: de cómo dejaron atrás su cómoda vida en Reino Unido, sus carreras de empresarios de éxito, tras graduarse en Oxford y Cambridge, para recorrer durante estos años las montañas, los valles y las costas de Europa.
Ambos han vivido en Francia, Suiza, Austria, Italia, Eslovenia y Liechtenstein, disfrutando de los veranos en los Alpes y los Pirineos y los inviernos, en España. En la localidad almeriense de San José adoptaron a una perrita callejera que tuvo varios cachorros que les acompañan en su aventura. Aunque cuentan con ahorros suficientes, de forma esporádica han trabajado en granjas.
Hace un mes, Esther quiso hacer una ruta de senderismo por los Pirineos, pero Dan prefirió quedarse a descansar en Gascuña, en Francia. Habían quedado en volver a verse el miércoles 26. Según él, hablaron sobre lo "emocionados" que estaban por el reencuentro. Ahora el joven participa en las labores de búsqueda. "Ella siempre ha tratado de no perder el contacto, pero a veces durante sus caminatas ha estado incomunicada un par de días", dijo al Mail Online. "Esto no pinta bien" reconoce, aunque no pierde la esperanza.