Italia se pone dura e impondrá cuarentena a los viajeros extracomunitarios


Sigue sin permitir viajes por motivos turísticos, sólo se puede entrar a Italia por razones de causa mayor
Italia fue, sin embargo, uno de los primeros en eliminar la cuarentena para ciudadanos de la zona Schengen
Italia votó a favor de la lista de 14 países a los que la Unión Europea ha abierto sus fronteras desde este miércoles, pero ha impuesto condiciones muy severas. Los ciudadanos de fuera de la zona Schengen que lleguen a Italia tendrán que cumplir una cuarentena obligatoria de dos semanas, lo que desincentivará a muchos a viajar. Y, además, sigue sin estar permitida la llegada de estos por motivos turísticos. Sólo se puede hacer por cuestiones de trabajo, salud o estudios.
De esta forma, Italia evita torpedear una negociación que ya fue suficientemente complicada en Bruselas, aunque se acoge a su derecho de adoptar una posición más dura en sus fronteras, un aspecto en el que sólo puede decidir cada Estado. Su intención sería presionar para que otros países también sean igual de restrictivos.
La gran duda es cómo vigilará a los visitantes de los 14 países a los que la UE permite la entrada si, en lugar de desembarcar directamente en Italia, lo hacen después de pasar por otro país comunitario. La cuarentena obligatoria sigue en vigor en ese caso, pero no habrá controles de fronteras, lo que supondría en la práctica eliminar la libertad de movimientos.
Desde el 15 de junio -España el 21 de junio- los cofines internos de la UE volvieron a abrir. Así pues, un austriaco puede entrar en Italia sin restricciones, pero no un japonés que haya estado primero en Austria. En ese caso tendría que demostrar razones de fuerza mayor y pasar la cuarentena.
“Italia escoge una línea de prudencia y mantiene un vigor el aislamiento y la vigilancia para todos los ciudadanos provenientes de países extra Schengen”, reza la nota emitida por el Ministerio de Sanidad. El titular del ramo, Roberto Speranza, ha mostrado siempre máxima cautela durante la pandemia y esta vez se ha impuesto su criterio, apoyado por el comité técnico-científico que lo asesora.
Italia, de los primeros en abrirse a la UE
No fue así hace un mes, cuando Italia fue uno de los primeros países de la UE en abrir sus fronteras eliminando la cuarentena para estos viajeros. En ese momento los criterios preponderantes fueron marcados por el Ministerio de Turismo, que intentaba así salvar mínimamente la temporada. Desde el 3 de junio ya se podía entrar libremente en Italia desde otro país de la zona Schengen, aunque como el resto no permitieron la libertad de movimientos hasta el 15, sólo entonces se notó la incidencia.
De la decena de rebrotes que se han producido en el país, ninguno ha estado provocado por extranjeros, todos han sido entre la población local. Sin embargo, los epidemiólogos mantienen alta la alerta ante las imágenes de las playas llenas de gente y las zonas de copas, donde los italianos han olvidado ya el uso de la mascarilla. El número de contagios diarios sigue moviéndose entre 150 y 200 diarios.
En cuanto al turismo, las autoridades calculan que al menos se perderá la mitad de los 60 millones de visitantes extranjeros que Italia estaba acostumbrada a recibir. Para reactivar la industria, este miércoles ha entrado en vigor una ayuda del Estado de hasta 500 euros para que los italianos se paguen sus vacaciones en hoteles u otros alojamientos autorizados. Durante las primeras horas, unas 70.000 familias ya lo habían solicitado.