Italia pasa la selectividad: “Por fin podré dormir”


Más de tres meses después, vuelven a abrir los institutos en Italia para celebrar la selectividad
Fue el primer país en cerrar las aulas, pero aún no tiene un plan para reabrirlas definitivamente
Una bedel espera sentada a que termine el último alumno. Los exámenes han empezado a las 8 y media de la mañana, es casi la hora de comer y sólo cinco estudiantes han pasado por aquí. Otros años, a las afueras del Instituto Margherita di Savoia de Roma habría una multitud celebrando el final de curso, pero hoy sólo está un vendedor de flores, aburrido en su quiosco. Al fin sale Giuseppe, ataviado con guantes, mascarilla y una impoluta camisa blanca. Los jóvenes italianos, siempre atentos a las formas, se toman muy en serio la selectividad. “Ha sido una prueba muy extraña, pero después de todo el empeño que han puesto los profesores y nosotros estudiando desde casa, se siente la satisfacción”, reconoce.
Pasados más de tres meses, los institutos italianos han vuelto a abrir sus puertas para comenzar las pruebas de selectividad. Finalmente se han podido celebrar de modo presencial, aunque extremando las medidas de precaución. Sólo un alumno entra al aula para para realizar el examen, que se desarrolla únicamente de forma oral, en un plazo de una hora. Giuseppe, que estudia el bachillerato artístico, ha traído además un dibujo que sirve como proyecto final. “Lo lógico sería estar ahora de fiesta, pero ya intentaremos hacer algo entre los compañeros después de la emergencia. Aún así, mi mayor alegría es que por fin podré dormir”, reconoce. Asegura que “ha ido bien” y que espera seguir su carrera como viñetista ya en la universidad.
Otros años sólo llegaban a esta prueba quienes hubieran aprobado todas las materias, pero este curso se ha decidido que todos, el medio millón de estudiantes en último de bachillerato, pasara por la selectividad. También cambia el método, ya que normalmente se realizaban distintas pruebas escritas, mientras que el oral era sólo una parte. “Estamos acostumbrados a hacer pruebas orales durante todo el liceo, pero en la selectividad es inevitable que te venga el ansia”, declara Ludovica, que no entiende eso de aplazar las celebraciones. Terminado el examen, se ha juntado con sus amigos, han comprado unas hamburguesas y se han ido a comer a una plaza. “Y después se va a la playa y se bebe al aire libre”, insiste la chica.
Los estudiantes italianos deben hacer una exposición de un tema asignado previamente, después leen un texto y lo analizan in situ, presentan sus conclusiones sobre los trabajos que han realizando a lo largo del curso y, por último, debaten sobre una serie de cuestiones cívicas o recogidas en la Constitución. Y todo esto de viva voz, por si alguien se pregunta por la retórica de los italianos. Otros años la selectividad pesaba un 60% por un 40% de las notas anteriores, mientras que este ejercicio se han invertido los porcentajes para que el trabajo en la época anterior al Covid tenga un mayor peso.
Exámenes en gimnasios o al aire libre
En el instituto de Ludovica las pruebas se han realizado en un aula convencional, como en la mayoría de centros. Aunque otros más innovadores han preferido hacerlo en gimnasios o al aire libre para tener más espacio. La ministra de Educación, Lucia Azzolina, estuvo en Bérgamo, una de las zonas más golpeadas por la epidemia, donde afirmó que “hacer los exámenes de forma presencial no lo dábamos por seguro”. “No ha sido fácil, algunos países europeos los han cancelado y estoy muy feliz viendo de nuevo las clases reabiertas aquí en Bérgamo”, manifestó.
Lo que aún no está claro es cómo ni cuándo abrirán de nuevo definitivamente. El 4 de marzo, Italia se convirtió en el primer país europeo en cerrar las aulas y, con todas las actividades ya en marcha, aún no tiene un plan para la vuelta de colegios, institutos y universidades. La ministra de Educación anunció este martes que el 1 de septiembre ya será posible realizar los exámenes de recuperación en las aulas, mientras que la fecha que se contempla para el inicio del curso es el 14 de septiembre. El Gobierno decretó que todos los alumnos pasen este año de nivel, aunque deberán recuperar las asignaturas pendientes.
A estas alturas del año los sociólogos son reclamados en televisión para explicar que la selectividad, que en italiano lleva el nombre de maturità (madurez), representa el paso de la adolescencia a la edad adulta. Y tampoco han faltado esta vez, añadiendo que era fundamental para la formación de los jóvenes realizar esta prueba de la forma más natural posible. Como si de lo contrario, quedaran atrapados eternamente en el síndrome de Peter Pan. Tras meses de lecciones 'online' y estudio en casa, los alumnos italianos ya habían pasado un examen de madurez.