La ministra para las Mujeres de Alemania recomienda no usar "puntuación inclusiva" en las administraciones


La socialdemócrata Christine Lambrecht, ministra saliente de Justicia y también de Familia, Mayores, Mujeres y Juventud, recomienda en sus últimos días en el poder abandonar el uso de las formas tipográficas más complejas del lenguaje inclusivo alemán.
La ministra socialdemócrata alemana Christine Lambrecht ha esperado al último suspiro de la última legislatura que ha dominado la 'gran coalición' de Angela Merkel para emitir una recomendación sobre el uso de ese lenguaje.
Lambrecht, la última ministra de Justicia que ha tenido Angela Merkel y responsable también del Ministerio de Familia, Mayores, Mujeres y Juventud desde la dimisión de su compañera de partido Franziska Giffey por un escándalo de plagio en su tesis doctoral, emitía en septiembre unas recomendaciones sobre el uso del “alemán inclusivo”, según informaba a principios de este mes el diario Neuer Osnabrücker Zeitung.
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Destinada a la administración federal, ministerios y Cancillería Federal, la recomendación por escrito que hacía llegar Lambrecht a las autoridades germanas se pronunciaba en contra del uso de esas formas tipográficas inclusivas que de un tiempo a esta parte han popularizado su uso. A saber, asteriscos, dos puntos o guión bajo.
Jetzt live auf YouTube: Unterzeichnung der Erklärung "Gemeinsam gegen #Sexismus und sexuelle Belästigung" mit Frauenministerin Christine Lambrecht. https://t.co/37jWOgQgB7
— Familien-, Senioren-, Frauen- & Jugendministerium (@BMFSFJ) 26 de octubre de 2021
Así funciona la "puntuación inclusiva"
Con ellos, por ejemplo, en los escritos con “alemán inclusivo” la palabra “lectores”, en alemán Leser, podría aparecer así: Leser*innen, Leser_innen o Leser*innenLeser_innenLeser:innen. Se supone que el uso de esas terminaciones visibiliza a las mujeres en el lenguaje.
Pero no hay una única forma de escribir en lenguaje inclusivo y, de hecho, en un reciente escrito con fecha de finales marzo de este año, el Consejo de la Ortografía Alemana, rechazaba el uso de esas formas “para indicar las designaciones de varios géneros dentro de las palabras”. El Consejo de la Ortografía Alemana es lo más parecido a la Real Academia Española.
Es ist eine gesamtgesellschaftliche Aufgabe, sexualisierte #Gewalt zu verhindern. Heute haben Christine #Lambrecht, Unternehmen, Gewerkschaften und Organisationen deshalb die Erklärung „Gemeinsam gegen #Sexismus und sexuelle Belästigung“ unterzeichnet. pic.twitter.com/qzVePDR2Tw
— Familien-, Senioren-, Frauen- & Jugendministerium (@BMFSFJ) 26 de octubre de 2021
Dicho consejo es el organismo autorizado para la ortografía alemana. Entre sus principales funciones figura el seguimiento y desarrollo de la ortografía alemana, la preservación de la uniformidad de la ortografía en el mundo germanohablante y la aclaración de casos dudosos de ortografía.
Lambrecht parecía alinearse en su recomendación a las autoridades con el Consejo de la Ortografía Alemana. No obstante, más que un ordenamiento, según han precisado desde su equipo, el escrito a las autoridades que firma Lambrecht ha de servir como “ayuda para la orientación” ante un panorama lingüístico que se ha complicado dadas las múltiples formas en las que se está haciendo “inclusivo”.
“Una responsabilidad especial para expresar la igualdad”
“La igualdad entre mujeres y hombres también se expresa en el lenguaje. Al mismo tiempo, la lengua es diversa y siempre refleja la evolución social. Cada uno es libre de utilizar las expresiones que le convengan”, explican a NIUS desde el Ministerio de Familia de Alemania. Sin embargo, “la administración federal tiene una responsabilidad especial para expresar la igualdad entre mujeres y hombres en el lenguaje y tener en cuenta las normas vinculantes del Consejo de Ortografía Alemana”, añaden las fuentes consultadas por este diario.
Así, del mismo modo que Lambrecht desaconseja los asteriscos, los dos puntos y el guión bajo, la ministra ha recomendado a las instituciones federales no usar el masculino genérico cuando exista la forma de la palabra en femenino, salvo cuando la palabra en cuestión se refiere a personas jurídicas abstractas. Por ejemplo, en lugar de hacer alusión a “lector” o “cliente”, Leser o Kunde, formas plurales que coinciden con el masculino de lector, Leser o Kunde, habría que escribir en los documentos del Estado Leser Leser und LeserinenKundeund.
Según lo informado por el Neuer Osnabrücker Zeitung también insta Lambrecht a, cuando sea posible, usar términos neutrales desde un punto de vista del género y a una gestión “pragmática” del lenguaje inclusivo ante nombres como “Conferencia de Presidentes de los Länder”.
La ministra también pide pragmatismo
Para Lambrecht, este organismo, crucial en la toma de decisiones en la pandemia porque permiten que en Alemania haya unos criterios mínimos compartidos entre los estados federados, es preferible que se llame así a que reciba otro nombre más inclusivo. Por ejemplo: “Conferencia de la canciller con los jefes de Gobierno y jefas de Gobierno de los Länder”.
En alemán, la “Conferencia de Presidentes de los Länder” es algo que se designa con una sola palabra: “LänderMinisterpräsidentenkonferenz. La expresión más inclusiva de ese foro, en alemán, necesita diez palabras: “Konferenz der Bundeskanzlerin mit den Reigerungschefinnen und Regierungschefs der Länder”.
El lenguaje inclusivo generó, en la pasada campaña electoral, algo de debate, siendo incluido entre los temas que trataron en los enfrentamientos televisados los tres favoritos a ser canciller, es decir, el conservador Armin Laschet, la ecologista Annalena Baerbock y el socialdemócrata Olaf Scholz. Éste último, al que todo apunta ahora mismo que será el sustituto de Merkel si llegan a buen puerto las negociaciones en curso entre socialdemócratas, ecologistas y liberales, decía en el primero de esos debates que “cada uno debe decidir por sí mismo” a la hora de utilizar el lenguaje inclusivo.
Días más tarde, Lambrecht emitiría sus recomendaciones. Pero el debate sigue servido. Porque en vista de la falta de reglas claras, hay regiones en las que la inclusividad en el Lenguaje se ve como algo problemático.
ZDF-Politbarometer - Riesige Mehrheit gegen Gender-Sprache in Medien https://t.co/u4u3wQk275
— BILD (@BILD) 19 de julio de 2021
El 71% de los alemanas rechaza el lenguaje inclusivo
Esa es la visión de Christian Ploß, jefe de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) en la ciudad-estado de Hamburgo (norte germano), donde gobiernan el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y Los Verdes. También en el norte alemán, en el Land, un estado federado donde gobierna una coalición de conservadores, ecologistas y liberales, desde la CDU se está promoviendo la idea de realizar un referéndum sobre la escritura inclusiva.
Tobias Koch, líder de la CDU en el parlamento regional de Schleswig-Holstein, reconoce que el lenguaje inclusivo “sensibiliza”. Pero, para él, es “problemático que cada cual actúe siguiendo sus propias reglas”. Sobre todo cuando, entre otras cosas, el Consejo de la Ortografía Alemana entiende que utilizar asteriscos, guiones o puntos dentro de palabras “perjudica la comprensibilidad”.
El diario Bild, el más leído del país, recordaba al dar cuenta de las intenciones de Koch de organizar un referéndum sobre esta cuestión, que la gran mayoría de la población alemana rechaza cómo se está implementando la inclusividad en el lenguaje. El 71% de los consultados por el instituto de opinión Forschunsgruppe Wahlen rechazaba el uso de asteriscos y demás.