El conflicto del gas podría volver esta Navidad
Ucrania es territorio de paso obligado para el gas que Rusia exporta a Europa
La trampa de la geografía. Ucrania es territorio de tránsito obligado para el gas ruso de camino a Europa, sin el cual muchos países de Europa central y oriental son incapaces de pasar el invierno porque los suministros alternativos no son suficiente para compensar la hipotética pérdida de gas ruso.
El actual acuerdo de tránsito acaba a finales de año y las negociaciones están bloqueadas mientras países como Eslovaquia, Bulgaria, Hungría o incluso Alemania esperan que no se repitan las crisis de los inviernos de 2005-2006, 2007-2008 y 2008-2009, cuando durante días y hasta semanas se interrumpió el suministro de gas ruso. Muchos sectores industriales tuvieron que parar mientras los países del este, en pleno invierno, racionaban la energía.
Tanto a Ucrania como a Rusia les interesa que el gas siga su camino. Kiev, sostenido por el FMI y por préstamos europeos, necesita los ingresos que le proporciona el tránsito. Moscú tampoco está tan boyante económicamente como para permitirse dejar de exportar gas a Europa. La Comisión Europea intenta mediar, pero la última reunión que organizó, a finales de octubre, acabó sin acuerdo.
La bronca actual vuelve a ser la misma de siempre. Ucrania quiere cobrar más por los derechos de tránsito y Rusia no acepta pagar más. Los dos países siguen técnicamente en guerra desde la anexión rusa de la provincia ucraniana de Crimea y el apoyo ruso a los separatistas armados del sureste ucraniano.
En pocos años Rusia tendrá una alternativa
Y los dos países saben que las guerras del gas pueden acabarse, para tragedia de Ucrania, cuando entre en funcionamiento el Nordstream II, el segundo gasoducto que unirá directamente Rusia y Alemania por debajo del Mar Báltico y que será capaz de asumir el tránsito del gas que ahora pasa por Ucrania.
Moscú rechazó la tarde del miércoles la última propuesta de Ucrania porque, argumentan los rusos, los ucranianos siguen pidiendo demasiado, algo que niega Kiev. Las relaciones entre los dos países no han vuelto a cauces normales desde el estallido del conflicto por Crimea y el sureste ucraniano en 2014. El presidente ruso Vladimir Putin dijo que quiere seguir exportando gas a Europa a través de Ucrania pero que las condiciones de Kiev son inaceptables.
Mientras Gazprom dice que Ucrania pide demasiado, Naftogaz, la empresa pública de gas de Ucrania, asegura que para calcular las tasas de tránsito usó la metodología habitual en Europa en cuanto al tránsito de hidrocarburos. Y que si a Rusia le parece demasiado caro es porque hasta ahora estaba pagando menos de lo debido.
El presidente ruso Vladimir Putin se reunirá el próximo lunes en París con el ucraniano Volodymyr Zelenskiy. La semana pasada intentaron desatascar el conflicto durante una conversación telefónica en la que no se movieron de sus posiciones. Si el 31 de diciembre sigue sin haber acuerdo, Ucrania podría bloquear el tránsito de gas ruso por su territorio. Europa empezaría a usa sus reservas y Moscú y Kiev mantendrían el pulso. Si a corto plazo Moscú depende de Kiev para hacer pasar su gas a Europa, a medio y largo plazo Gazprom podría evitar el territorio de Ucrania para el tránsito de gas.