La ultraderecha alemana acusa al embajador de Ucrania de hacer la vista gorda con los neo-nazis ucranianos


El embajador de Ucrania en Alemania, Andrij Melnyk, genera mucha incomodidad entre los políticos germanos por poner de relieve las persistentes incoherencias de Berlín en su política hacia Rusia.
Hasta en la ultraderechista Alternativa por Alemania (AfD) los hay que se meten con él porque, dicen, hace la vista gorda con los extremistas de derechas de Ucrania.
Si en Alemania recientemente se daba luz verde a los servicios de inteligencia del Ministerio del Interior, a la llamada aquí Oficina Federal de Protección de la Constitución (BfV, por sus siglas alemanas), para espiar a AfD por su extremismo de derechas es, en parte, por los no pocos ejemplos de ese extremismo que ha dado ese partido en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Land del noreste teutón.
Sin embargo, y precisamente en el Grupo Parlamentario de AfD en el Parlamento de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, hay quienes prefieren ver la paja en ojo ajeno.
Esto es al menos lo que parece al saberse de las críticas que el líder de dicho grupo, Nikolaus Kramer, ha tenido a bien realizar contra el embajador de Ucrania en Alemania, Andrij Melnyk. Esas críticas se centran en la actitud del diplomático frente a los grupos extremistas activos en du país, atacado ilegalmente por Rusia desde el pasado 24 de febrero.
“Aparentemente, Melnyk no es muy bueno con el Estado de derecho. No es una gran sorpresa. Después de todo, él ha defendido públicamente al batallón de extrema derecha Azov, al que se ha acusado de crímenes de guerra”, ha dicho Kramer en unas declaraciones recientemente recogidas por el diario regional Nordkurier.
Así respondía Kramer a las críticas que hacía Melnyk recientemente contra varios partidos políticos que, en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, se habían opuesto a que ese Land diera para fines humanitarios en Ucrania los fondos públicos destinados a una polémica fundación acusada de haber sido creada para apoyar la creación del gasoducto Nord Stream 2.
“Vaya, buena compañía: el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), Die Linke y AfD se oponen a que los 20 millones de la falsa fundación de Gazprom de Mecklemburgo-Pomerania Occidental. ¡Buena suerte !”, tuiteaba Melnyk.
Na, tolle Gesellschaft: SPD, die Linke & AfD sind dagegen, um 20 Millionen € Gasprom-Geld aus der Fake-MV-Klimastiftung der Ukraine zugute zu kommen. Viel Glück Euch noch, da in Schwerin https://t.co/vYu1jPki3p
— Andrij Melnyk (@MelnykAndrij) March 22, 2022
Tras la ofensiva de Rusia contra Ucrania, el Land de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, gobernado por el SPD y donde AfD es el principal partido de la oposición, decidió disolver dicha fundación, cuyo nombre era Fundación Clima y Protección del Medioambiente Mecklemburgo-Pomerania Occidental. Dicha fundación estaba destinada, según sus críticos, a crear argumentos en defensa del Nord Stream 2.
El Nord Stream 2 es un gasoducto que une Rusia a Alemania directamente por el mar Báltico. El gasoducto llega a Alemania por la costa de Mecklemburgo-Pomerania Occidental. Tras el reconocimiento de Vladimir Putin de las prorrusas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL), territorios desde los que el Ejército ruso también se está proyectando en su invasión en Ucrania, Alemania congeló la certificación dicha infraestructura.
En lugar de criticar los manejos de la política en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, según Kramer, el líder de AfD en ese Land, Melnyk debería “defender su país con un arma en lugar de molestar diciendo tonterías desde su oficina de Berlín”. “Así podría ser útil, porque claramente la diplomacia no es su punto fuerte”, abundaba el ultraderechista.
En el SPD han llamado a Melnyk “insoportable”
Kramer no es, ni de lejos, el único político molesto con Melnyk. Recientemente todo un Secretario de Estado para la Construcción, el socialdemócrata Sören Bartol, decía en un tuit que acabó borrando que el embajador era “insoportable”. Bartol se expresaba así después de una de las críticas de Melnyk contra el canciller alemán Olaf Scholz.
Para Melnyk, Alemania no hace lo suficiente para plantar cara a la Rusia de Vladimir Putin. Eso, a pesar de que, según no pocos analistas, la política alemana vive tiempos de cambio histórico debido al shock que ha supuesto la guerra contra Ucrania.
"Nueva era", "Revolución" política, "cambio histórico", todo esto se dice del giro operado en Alemania tras la invasión de Rusia a Ucrania en @NiusDiario. https://t.co/aWw82dfVu2.
— Salvador Martínez Mas (@SmmEnBerlin) February 28, 2022
La labor que está desempeñando este diplomático, habitual ya de los debates mediáticos germanos sobre la ilegal guerra de Rusia contra Ucrania y sus consecuencias internacionales, se ha descrito aquí como la de alguien que “desenmascara las mentiras existenciales de Alemania”, según los términos del influyente diario Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Melnyk, el "psicólogo para la política exterior" de Alemania
“Melnyk está haciendo un trabajo extraordinario. Fíjese que nadie que esté pendiente de la actualidad conoce a los embajadores en Alemania, salvo a Melnyk”, conviene en afirmar a NIUS Olaf Boehnke, analista en Berlín de la consultora internacional Rasmussen Global. Boehnke conoce desde hace años a Melnyk y se atreve a calificar al diplomático ucraniano el “psicólogo de Alemania para la política exterior”.
“Cosas como lo que se ha visto recientemente, a saber, que la presidenta de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Manuela Schwesig, haya pedido perdón por la fundación del Nord Stream 2 no sería posible sin alguien como Melnyk”, apunta Boehnke.
Melnyk está denunciando, por ejemplo, el “cinismo” del presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier cuando éste decía que el Nord Stream 2 era no menos que una “deuda” de Alemania por los crímenes del nazismo en la Unión Soviética. En Alemania, cuando se habla de esos crímenes, muy pocos piensan en la brutal ocupación del III Reich en Ucrania.
Alemania ‘se olvida’ de los crímenes nazis en Ucrania, en @NiusDiario. https://t.co/7GiBLh5IXv.
— Salvador Martínez Mas (@SmmEnBerlin) January 31, 2022
“¿Por qué miras la paja que está en ojo ajeno?”
“Con términos siempre, muy claros, por ejemplo, Melnyk ha buscado desde 2014, desde la anexión en Crimea y el inicio del conflicto en el Dombás, que en Alemania se llamara a eso una guerra, porque es, en realidad, una guerra para la gente que vive en esas regiones de Ucrania”, según Boehnke. En general, la élite política alemana sólo ha adoptado esa terminología tras el inicio de la invasión de Rusia contra Ucrania.
Aún así, muchos, en lugar de dar la razón a Melnyk ante lo que este diplomático venía advirtiendo sobre lo que ahora se denuncia en Europa como “neo-imperialismo ruso”, siguen defendiendo ideas como la necesidad de seguir dialogando con Rusia y se muestran molestos con el diplomático ucraniano. Kramer, y otros en su partido, están en este grupo. De ahí que agitara el espantajo del Batallón Azov para tratar de responder a Melnyk.
Sobre dicho batallón, integrado en el Ejército ucraniano, al ser tema de comentarios en Alemania, Melnyk tuiteó con su habitual tono inspirado y combativo. “Gente, sería mejor que os ocuparais de vuestros propios radicales de derechas”, según Melnyk, que recordaba que en el Parlamento Ucraniano no hay “radicales derechas” como sí los hay en el Bundestag a través de AfD.
Además, citaba al Evangelio según Mateo, donde se lee: “¿Por qué miras la paja que está en ojo ajeno y no ves la viga del tuyo?”
Leute, kümmert euch lieber um eure eigenen Rechtsradikalen. Im ?゚ヌᆭParlament sitzen sie nicht. „Warum siehst Du den Splitter im Auge deines Bruders, aber den Balken in deinem Auge bemerkst du nicht“ (Matthäus 7.3) https://t.co/i0EQxaUcka
— Andrij Melnyk (@MelnykAndrij) March 21, 2022