Éxitos inmobiliarios sobre la “cicatriz” del muro de Berlín 31 años después de su caída


Archigon es un empresa berlinesa que ha levantado modernos edificios de viviendas en lo que otrora fue el recorrido del muro de Berlín, una funesta infraestructura de cuya caída se celebran 31 años este lunes.
Pocas fechas resultan más complicadas en la traumática historia alemana que el 9 de noviembre. Ese día, en 1938, fue el que eligieron los nazis para lanzarse en una ola de ataques contra los judíos alemanes que duró 48 horas.
Se estima que en ese progromo, más conocido como la "Noche de los Cristales Rotos", murieron un centenar de germanos de cultura hebrea. En aquella ola de ataques antisemitas decenas de miles de personas fueron detenidas por el hecho de ser judíos.
Con los actos de conmemoración relativos a esa ola de violencia conviven aquí las iniciativas memoria histórica dedicadas a preservar el recuerdo de la caída del muro de Berlín. El 9 de noviembre 1989 cayó el muro que partía la capital alemana. Por eso este lunes se celebraba aquí el 31º aniversario del fin de esa funesta infraestructura de la dictadura comunista que fue la República Democrática de Alemania (RDA).
Más allá de los actos conmemorativos oficiales organizados el pasado fin de semana y este mismo lunes por instituciones como la Fundación Muro de Berlín, la más importante que está encargada de evitar el olvido del muro que separó a los berlineses durante casi tres década (1961-1989), el debate público germano mostraba poco esfuerzo en rememorar los 31 años del fin de la separación física sufrida por los berlineses durante la Guerra Fría.
Las potradas de los principales y más serios periódicos de la capital alemana, Der Tagesspiegel, Die Tageszeitung y Berliner Zeitung, tenían como asuntos del día otros temas “más importantes”. Por ejemplo, los había que aún lidiaban con la persistente resaca informativa de la elección presidencial estadounidense. Artículos sobre los 31 años de la caída del muro de Berlín había que encontrarlos en páginas interiores.
250 viviendas sobre la “cicatriz” del muro
Pero en vista de esa cobertura, en Archigon, una empresa berlinesa encargada de diseñar y realizar proyectos inmobilarios, tienen por qué alegrarse. Porque en sus páginas centradas en Berlín, el diario Berliner Zeitung hablaba de uno de sus últimos proyectos.
Ubicado en el barrio de Alt-Treptow, en el éste berlinés, el edificio de viviendas de Archigon ocupa lo que antes fue la frontera creada por la RDA. Se trata de un moderno proyecto inmobiliario con capacidad para 250 viviendas.
“En realidad, ya tenemos tres edificios que se encuentran en lo que era la zona del muro”, precisa a NIUS René Van Bernum, responsable de la empresa berlinesa. “En 1995 ya estaban todas las partes del muro desmanteladas, a parte de las que hoy sirven de espacios para la memoria histórica, como la East Side Gallery o la parte que ocupa la Fundación Muro de Berlín”, comenta este berlinés criado en la RDA.
Tanto es así que, según recordaba este lunes el periódico Der Tagesspiegel, de los 32 kilómetros que llegó a medir el muro de Berlín, sólo quedaban en pie unos 4 kilómetros pasado el primer año de la caída de aquella frontera artificial.
A Van Bernum le tocó vivir la caída del muro de Berlín haciendo el servicio militar en la RDA. “El 9 de noviembre de 1989 yo tenía 24 años, pero estaba en el cuartel y no pude ir a celebrarlo”, comenta Van Bernum.
Una empresa que recuerda el recorrido del muro de Berlín
Lo que sí puede hacer ahora es estar de enhorabuena por el éxito de su empresa. Los edificios que está levantando Archigon sobre la cicatriz que dejó el muro de Berlín son un éxito. Sus viviendas se venden incluso antes de que los inmuebles estén terminados.
En esto también tiene mucho que ver con la situación de urgencia habitacional que se vive en la capital alemana No hay suficiente oferta de viviendas porque no se construye al ritmo que viene creciendo la población de la metrópolis germana del este teutón.
En el último proyecto de Archigon en Berlín, junto al edificio de viviendas, hay unos pilares de hormigón en fila que recuerdan el recorrido del muro de Berlín. “Nadie nos pidió que los instaláramos, fue una idea nuestra, queríamos que así quedara señalado el recorrido del muro. No se trata de una idea del Gobierno de Berlín, sino algo surgido por iniciativa de la empresa privada que somos”, explica Van Bernum.
El gesto por la memoria histórica de Archigon no es un argumento de venta. Van Bernum, que se ocupa entre otras cosas de las ventas de la empresa, reconoce que “nadie de quienes compran las viviendas saben que nuestros edificios están en lo que fue el recorrido del muro de Berlín y si lo saben es porque nosotros les hemos informado”.
“Ahora mismo, en Berlín, muy poca gente puede hacerse una idea de lo que fue el recorrido del muro”, plantea Van Bernum.
Memoria contra la opresión comunista
El paso de las décadas está dejando caer en el olvido mucha de la historia que se fue con el desmantelamiento del muro de Berlín. Con todo, aquellos 32 kilómetros de hormigón y torres de vigilancia con soldados fuertemente armados no podrán caer fácilmente en la desmemoria.
Para evitar que así sea trabajan en la Fundación Muro de Berlín y en organizaciones como la Unión de Asociaciones de Víctimas de la Dictadura Comunista (UOKG, por sus siglas alemanas). En ésta última reconocen que el 31º aniversario de la caída del muro no ha dado lugar a grandes actos, entre otras cosas, por la pandemia de la COVID-19.
“Además, el 31º aniversario viene después de haberse celebrado el pasado mes de octubre los 30 años de la Reunificación de Alemania”, dice a NIUS Benjamin Baumgart, uno de los responsables de la UOKG.
En su organización están satisfechos con el trabajo de memoria histórica relativa al muro de Berlín que se viene realizando en la ciudad. Sin embargo, en la UOKG anhelan que pronto pueda haber un monumento dedicado a las víctimas del comunismo en Alemania.
A finales del año pasado, el Bundestag votaba a favor de levantar un memorial con ese mensaje. Se espera que ese monumento se levante el próximo año. Según la UOKG, las víctimas del comunismo en Alemania se cuentan por centenares de miles. “Sólo los prisioneros políticos constituyen un grupo de unas 240.000 personas”, concluye Baumgart.