Evo Morales dimite como presidente de Bolivia

Ha renunciado tras tres semanas de intensas protestas
Ha denunciado un golpe de Estado
El presidente boliviano, Evo Morales, ha anunciado su dimisión. No ha conseguido apaciguar los ánimos con el anuncio de unas nuevas elecciones. La presión en las calles ha podido con él tras tres semanas de intensas protestas. Se desembocaron por las sospechas de fraude electoral en la primera ronda de las elecciones presidenciales del 20 de octubre. Desde entonces, el país estaba inmerso en una espiral de violencia.
En las últimas horas, las Fuerzas Armadas habían pedido la renuncia del mandatario. Se va tras 14 años en el poder. En un mensaje grabado difundido por la televisión, Morales ha denunciado un golpe de Estado, "un golpe cívico, político y policial".
Ha denunciado un "golpe cívico, político y policial"
Ha dicho adiós reivindicando sus logros en el poder. "Mi pecado es ser dirigente sindical, es ser indígena, es ser cocalero", ha asegurado. "Todo por Bolivia, todo por la patria", ha insistido. Ha acusado a su rival, el opositor Carlos Mesa, de instigar la violencia. Y ha expresado también su solidaridad con su hermana, cuya casa ha sido incendiada por grupos de radicales: "Renuncio para que dejen de quemar las casas de mis hermanos". También han sido incendiadas las viviendas de dos gobernadores. "La lucha sigue", han sido sus últimas palabras ante la cámara.
Acusaciones de fraude
El estallido de las protestas y las acusaciones de tongo se dispararon tras un controvertido escrutinio. Con el 83% de los votos, el recuento fue suspendido. Morales conseguía el 45% y su rival el 38%. Según ese resultado era necesaria, una segunda vuelta, ya que la diferencia entre ambos no superaba los diez puntos necesarios para evitar la segunda vuelta.
El apagón informativo concluyó 23 horas más tarde. Cuando la autoridad electoral anunció los nuevos resultados -con el 95% de los votos escrutados- la situación era muy distinta: el presidente había ampliado su ventaja y ya no necesitaba una segunda vuelta para ganar las elecciones.