La lengua de fuego que atrae a miles de fotógrafos al parque nacional de Yosemite

La cascada Horsetail Fall parece convertirse en fuego gracias a un efecto óptico que se produce en el mes de febrero
El parque nacional de Yosemite, en la Sierra Nevada de California, vive estos días una efervescencia de visitantes y fotógrafos dispuestos a disfrutar de uno de los fenómenos naturales más fascinantes y retratados de los últimos años.
Un efecto óptico convierte su famosa cascada Horsetail Fall de 300 metros, al Este del Gran Capitán, en una gran lengua de fuego. La imagen se produce todos los años a finales de febrero y cada año congrega a más fotógrafos. El 22 de febrero del año pasado, fueron 2.200 aficionados y profesionales de la fotografía los que apuntaron a la cascada con sus teleobjetivos.
En las primeras semanas del mes de febrero, cuando comienza a derretirse el hielo y la nieve, se da uno de los mayores espectáculos visuales de la #naturaleza, la “Cascada de Fuego” 🔥 en el Parque Nacional de Yosemite.#BiodiversidadMaravillosa pic.twitter.com/wC5mX3X2Hk
— Fundación Biodiversidad (@FBiodiversidad) February 10, 2020
Para que la famosa 'cola de caballo' se convierta (visualmente) en fuego hacen falta condiciones muy especiales, que sólo se dan en esta época del año. Lo fundamental es que el nivel de humedad permita que la cascada baje con un buen caudal, algo que este año se prevé incierto, debido a las escasas lluvias que está recibiendo la región. Es necesario, también, que el cielo despejado permita al sol alcanzar la superficie con una intensidad especial. A partir de ahí, sólo queda esperar a que los rayos alcancen un ángulo determinado que -durante un breve espacio de tiempo- desate la magia.
El fenómeno ha alcanzado tal popularidad gracias a las redes sociales que la dirección del parque nacional ha tenido que regular los accesos a los tres lugares desde donde mejor retratar un efecto que parece diseñado por ordenador.