Nueva Zelanda: el antes y el después del volcán en erupción

Los equipos de emergencia han suspendido la recuperación de los cadáveres por temor a nuevas erupciones
Las autoridades confirman seis muertos y nueve desaparecidos
Nueva Zelanda ha suspendido las labores de búsqueda por temor a una nueva erupción del volcán Whakaari en una turística isla del noroeste del país. Al menos seis personas han muerto, hay una treintena de heridas y nueve desaparecidas desde el lunes, cuando se produjo la fatídica explosión. Las autoridades han dado la lista de los nombres y nacionalidades de los desaparecidos: siete son australianos y dos neozelandeses.
Los forenses han identificado a los seis fallecidos. Entre las 30 personas hospitalizadas en unidades de quemados, la mayoría presenta un pronóstico grave, y los médicos creen que no todos sobrevivirán. La prioridad de los equipos de emergencia es regresar a la isla para recuperar los cadáveres porque dan por hecho que no hay supervivientes.
La agencia gubernamental geológica GeoNet cree que hay entre un 40 y un 60 % de posibilidades de que se produzca una nueva erupción en las próximas 24 horas. La primera explosión volcánica sucedió pasado el mediodía del lunes y cuando 47 turistas visitaban esta ísla privada, ubicada a unos 40 kilómetros al este de la Isla Norte.
El volcán de la isla Whakaari (isla White), a 48 kilómetros de la costa este de la isla Norte de Nueva Zelanda, ha entrado en erupción. Policía confirmó la muerte de 6 personas, pero las autoridades aseguran q hay indicios del fallecimiento de otras 8 q están desaparecidas. pic.twitter.com/KYGU0GQzf6
— 🎙Fabry Espinoza Larco (@jofabrol) 11 de diciembre de 2019
La Policía de Nueva Zelanda ha abierto una investigación sobre las posibles responsabilidad que incluye a los operadores turísticos que realizan excursiones a esta isla, visitada en 2018 por más de 17.500 personas, si bien los oficiales matizaron que todavía es ponto para saber si las indagaciones derivarán en un delito penal.
El Whakaari, de 321 metros de altura y cuyo 70 por ciento de estructura se encuentra bajo el nivel del mar, se considera uno de los volcanes más activos de Nueva Zelanda y en ello reside parte de su atracción turística. Se encuentra en el Anillo de Fuego del Pacífico y la anterior erupción se produjo en 2016 sin causar muertes.