La consolidación ecologista podría poner a su candidato en la segunda vuelta de las próximas presidenciales
El triunfo relativo de los ecologistas en la segunda vuelta de las municipales francesas celebradas este domingo consolida el auge de la formación verde apuntado en las europeas de mayo de 2019 y se muestra como una amenaza al presidente Emmanuel Macron de cara a las presidenciales de mayo de 2022. Todos los sondeos muestran que la candidata ultraderechista Marine Le Pen rondaría el 30% en la primera vuelta y se podría ir hasta un porcentaje de voto entre el 40% y el 45% en segunda vuelta, mejorando en al menos 10 puntos su resultado de 2017.
Ante esa panorama y el auge ecologista Macron no tiene asegurado el paso a la segunda vuelta, que podría terminar siendo un enfrentamiento entre Le Pen y el ecologista Yannick Jadot, eurodiputado desde el año pasado y director de campañas de Greenpeace Francia entre 2002 y 2008. Jadot, que oficialmente no es candidato a nada todavía, dijo anoche en televisión: “Lo que ganó esta noche, me parece, es la voluntad de una ecología concreta, de una ecología en acción, la esperanza alrededor de un bonito proyecto”.
Feudos conservadores que pasan al ecologismo
El auge ecologista parece consolidado después del buen papel en las últimas europeas. Sus victorias de este domingo, en unas elecciones marcadas por una baja participación (44,3%), se produjeron en ciudades tradicionalmente progresistas pero también en feudos que habían tenidos alcaldes conservadores desde la Segunda Guerra Mundial, como Burdeos. Los ecologistas podrían incluso hacerse con la Alcaldía de la muy conservadora Marsella gracias al apoyo de una coalición de izquierdas.
Los socialistas salvaron Lille por un puñado de votos y París con un buen resultado después de que una de sus figuras emergentes, la hispano-francesa alcaldesa de la capital, Anne Hidalgo, hiciera una campaña absolutamente volcada hacia las propuestas ecologistas. Hidalgo es señalado precisamente para liderar a los socialistas en las próximas presidenciales. Además de París y Lille, los socialistas lograron conservar Rennes, Nantes, Le Mans, Clermont-Ferrand, Dijon, Nancy y Montpellier.
¿Macron ecologista?
Macron va a tener que empezar a vestirse de verde para frenar la ola ecologista que amenaza con dejarle fuera de la segunda vuelta presidencial en menos de dos años. Para empezar, este lunes recibió a primera hora –antes de viajar a Alemania a encontrarse con Angela Merkel- a los miembros de la Convención Ciudadana sobre el Clima, a los que explicó sus “respuestas fuertes” y “a la altura de los desafíos”.
Otra decisión que podría llegar en días o semanas sería la de reestructurar su Gobierno con una crisis ministerial que podría llevarse por delante incluso la cabeza del popular (más popular que Macron) primer ministro Edouard Philippe y de los ministros más señalados. El presidente busca relanzar a su Gobierno para la fase de la recuperación económica que debería empezar en los próximos meses.
Sea cual sea la reacción del presidente, los resultados de este domingo muestran que se consolidan los ecologistas y con ellos sus temáticas mientras el partido de Macron, LREM, sólo puedo hacerse con una ciudad de más de 100.000 habitantes, Le Havre, precisamente donde será alcalde el primer ministro Philippe.
Los conservadores salen muy dañados de estas municipales después de perder feudos históricos y no poder consolidar a ninguna de sus figuras. Se agarran a pequeños municipios por su implantación en la Francia rural y apenas controlan, entre las grandes ciudades, Toulouse y Niza. La izquierda radical de Jean-Luc Mélenchon casi desaparece del mapa municipal.