"Aquí Mando Yo", el manual de Podemos que no gusta a Pablo Iglesias

El libro, publicado por el periodista Luca Constantini, desentraña en 238 páginas el llamado "fenómeno Podemos"
Conflictos internos y la "paranoia de sus líderes", el "populismo como el comunismo de nuevo cuño", la "sombra de la financiación venezolana", el "coqueteo con el nacionalismo" o los incipientes negocios de la empresa Neurona, la empresa asesora de Podemos señalada en Bolivia por cobrar presuntamente a dedo cantidades millonarias y contratar después a varias de las principales figuras del partido morado. Esos son los principales pilares de "Aquí Mando Yo", el libro publicado por el periodista Luca Constantini y que desentraña en 238 páginas el llamado "fenómeno Podemos".
El trabajo de investigación, publicado por La Esfera de los Libros, ahonda por ejemplo en la dura relación entre Pablo Iglesias y su compañero en la dirección del partido, Iñigo Errejón. Constantini explica que la relación entre ambos se deterioró tras las elecciones europeas de 2014, mucho antes de que las tiranteces entre ambos se hicieran públicas.
Por otro lado, el libro describe por primera vez la estrecha relación entre Neurona, una empresa que hace vídeos, campañas en redes sociales y hasta diseño de logos políticos, con Unidas Podemos. “Es una máquina para hacer dinero”, comentan las fuentes de Podemos al autor que sigue desde hace años la actualidad del partido morado. Juan Carlos Monedero, hombre fuerte de Iglesias, colaboró con esta empresa (como con muchas otras según sus propias palabras). Pero también lo hizo Pablo Gentili, ex jefe de gabinete de Iglesias que como revela Aquí Mando Yo llegó a España desde Brasil, donde asesoraba a Dilma Rousseff, gracias al fundador de Podemos.

Problemas en Bolivia
Ahora, el gobierno de Bolivia sospecha que Evo Morales realizó encargos por más de un millón de euros a esta consultora mexicana, con el fin último de financiar a Podemos. Sin embargo, no hay prueba alguna por el momento de que le dinero terminara directamente en cuestiones del partido. Neurona desembarcó en España pocas semanas antes de la campaña electoral de Podemos en 2019 y después de lograr los contratos con Morales. En las últimas campañas electorales los morados obtuvieron un récord de recaudación de microcréditos y ahora el Tribunal de Cuentas investiga si todas las facturas realizadas corresponden realmente a los trabajos realizados por las empresas externas contratadas. Cabe señalar que la Ley de Financiación de partidos prohíbe a las formaciones políticas financiarse directa o indirectamente con dinero de gobiernos extranjeros.
Además de Neurona, otra cooperativa forma parte de la galaxia de empresas consideradas afines de Podemos, según refleja el trabajo de Constantini. Se trata de Kinema, cuyo fundador fue Rafa Mayoral, otro dirigente destacado del partido morado. La actual gerente de Podemos, la persona que firma todos los contratos del partido para sus servicios externos, también dirigió Kinema. Esta cooperativa levantó centenares de miles de euros durante el gobierno municipal de Manuela Carmena.