Sánchez adelanta las elecciones generales al 23 de julio

Elecciones generales el 23 de julio. Primera consecuencia de la debacle del PSOE en las municipales y autonómicas del 28M. Pedro Sánchez ha dado un golpe de timón y ha tomado una decisión drástica que cambia por completo el tablero de juego en España. Tras perder el poder territorial a manos del PP que ha arrasado en toda España tiñendo el mapa de azul, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una declaración institucional en el Palacio de La Moncloa, ha decidido adelantar las elecciones generales al 23 de julio.

Ya ha comunicado su decisión de disolver las Cortes al rey Felipe VI. Esta misma tarde se celebrará un Consejo de Ministros extraordinario. La expectación era enorme desde que a primera hora la Secretaría de Estado de Comunicación convocase la declaración. Se había especulado con la posibilidad de que Sánchez rompiese con Podemos, pero la decisión ha ido más allá. El presidente sostiene que asume los resultados de su partido: "Y por eso, como presidente del Gobierno y también como secretario general del Partido Socialista, asumo en primera persona los resultados y creo necesario dar una respuesta y someter nuestro mandato democrático a la voluntad popular".

En su breve intervención sin preguntas, Sánchez ha afirmado que la primera consecuencia de los resultados es que "magníficos presidentes y alcaldes socialistas van a ser desplazados" pese a haber llevado a cabo "una gestión impecable". Un reconocimiento a los barones socialistas que han perdido sus gobiernos arrastrados por el desgaste del Gobierno y de la marca PSOE.

La segunda consecuencia, ha dicho, es que numerosas instituciones serán administradas por nuevas mayorías conformadas por el Partido Popular y Vox. Ya se vaticina que ese será el eje de la estrategia socialista en el periodo que se abre en estos momentos.

El presidente ha citado además que el Ejecutivo de coalición ya ha emprendido "las grandes reformas comprometidas en el discurso de investidura, en el programa de Gobierno" y que España se dispone a desempeñar la presidencia de turno de la Unión Europea que empieza el 1 de julio.

"Sólo hay un método infalible para solventar estas dudas, ese método es la democracia", ha señalado Sánchez al final de su declaración que pide a los españoles que se pronuncien para definir "el rumbo político del país".

El castigo en las urnas ha sido muy severo para los socialistas que perdieron las municipales a nivel global por casi 800.000 votos respecto al PP. Una derrota que además anticipa un cambio de ciclo en España con el viento soplando a favor de Alberto Núñez Feijóo.

Ya en una primera lectura, la cúpula socialista aseguró que no eran los resultados que esperaban y que había que hace una reflexión para recuperar la confianza. "Recogemos el guante. Desde ya nos ponemos a trabajar", dijo la portavoz del partido y ministra de Educación, Pilar Alegría.

Los socialistas no han conseguido su objetivo en estas elecciones, movilizar al electorado de izquierdas para retener el poder en varias comunidades autónomas que han sufrido un vuelco como la Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares, Extremadura o La Rioja. Ha sido clave además el descalabro de su socio de coalición, Podemos, fulminado de algunos parlamentos regionales como la Asamblea de Madrid o las Cortes Valencianas.