Calvo asume la posibilidad de tener que prorrogar los presupuestos actuales "un tiempo"


La vicepresidenta admite que el Gobierno va "muy ajustado" en los plazos de presentación de las nuevas cuentas
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, asume la posibilidad de que haya que prorrogar los Presupuestos Generales del Estado que estan actualmente en vigor al menos "por un estrecho margen de tiempo".
Las cuentas actuales son las de Montoro de 2018, aprobadas cuando aún gobernaba Mariano Rajoy. Han sido prorrogadas ya dos veces, y todavía tendrán que mantenerse un tiempo más hasta que sea posible culminar la negociación y aprobación de la nueva senda de déficit y el techo de gasto, en primer lugar, y después ya unas nuevas cuentas.
"Vamos muy ajustados, somos conscientes, pero no dramaticemos", ha admitido la vicepresidenta Calvo en Onda Cero, al anticipar esa posible continuidad del presupuesto Motoro aunque sea por poco tiempo. Para Calvo, esto subraya la necesidad de sacar adelante cuanto antes un nuevo proyecto, y de lograr el mayor número de apoyos posibles, sin que se "antepongan los juegos de la política". Para ella, las próximas cuentas deben ser "un mapa de respuestas muy precisas a cuestiones muy precisas", sobre los problemas que tienen los ciudadanos.
En caso de que los Presupuestos de 2018 se extiendan un año más, supondría la novena prórroga presupuestaria de la democracia, ya que sucedió anteriormente con las cuentas de 1978, 1982, 1995, 2011, 2016 y 2017 y, por tercera ocasión, sucedería con los de 2018, algo que no había ocurrido nunca antes.
Un calendario ajustado
Fuentes de Hacienda que cita Europa Press afirman que se mantiene la intención de presentar "en tiempo y forma" el proyecto de las nuevas cuentas públicas, para que entren en vigor cuando empiece el año, lo que evitaría la prórroga.
Para cumplir con los plazos de tramitación, y que los nuevos Presupuestos lleguen para el 1 de enero, el Gobierno tendría que llevar al Congreso el nuevo proyecto antes de finalizar septiembre. Sin embargo, el Ejecutivo todavía tiene pendiente aprobar y llevar al Congreso la nueva senda de estabilidad y el límite de gasto no financiero, el conocido como comúnmente como techo de gasto.
La propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ya asumió públicamente que el plan de tramitación se estaba desplazando "un poco" a causa de las negociaciones con los grupos parlamentarios. Aun así, reiteró su intención de defender en el Congreso el nuevo techo de gasto "a final de mes".