El alcalde de un pueblo de Castellón de 2.000 vecinos se dobla el sueldo en plena pandemia


La subida del sueldo de Enrique Vilar llega un año después de que se quedara sin su puesto en la Diputación de Castellón
La oposición del Ayuntamiento de Artana denuncia que "no es el momento de hacerlo"
Vilar responde que "se ampara en la ley" y que encuentra "muy justo" cobrar por trabajar
El alcalde de Artana, un municipio castellonense que no llega a los 2.000 habitantes, se subió el sueldo en la última comisión de Hacienda celebrada el pasado 22 de julio en plena crisis del covid-19. Así decía el acta: "Una retribución anual por importe de 23.800 euros brutos, distribuidos en 14 pagas mensuales de 1.700,00 euros brutos al mes".
Además, el sueldo del alcalde, Enrique Vilar, es el equivalente a media jornada, "una dedicación parcial del 50%", como también indica el documento. La medida fue tomada por el Gobierno del Partido Popular (PP) del pueblo, tras considerar que "la complejidad, responsabilidad y dedicación que requiere el ejercicio del cargo de Alcalde/sa en el municipio de Artana es muy superior al resto de concejales de la Corporación".
Vilar lleva en el cargo más de 20 años; desde 1999 el PP tiene mayoría absoluta en el Pleno del Ayuntamiento de Artana. Afirma que él tan solo "se ampara en la ley" y que encuentra "muy justo" que todas las personas que trabajen cobren: "Es un sueldo con una proporción aceptable para las dimensiones del pueblo". Desde 2013, cuando ya se subió el sueldo, cobraba 12.133 euros brutos al año sin dedicación y por asistencia a órganos colegiados.
La oposición no le encuentra al sentido a que en un municipio de 1.950 habitantes se cobre dicha cantidad. Salvador Ferrandis, portavoz del PSOE, indica que la subida del sueldo está de acuerdo con la ley, pero que no es precisamente necesaria: "Después de más de veinte años en el cargo, ahora resulta que tiene más responsabilidad y tiene que subirse el sueldo".
La subida llega un año después de perder el cargo en la Diputación
El alcalde ocupó un cargo en la Diputación de la provincia desde 2009 hasta 2019, donde su sueldo se veía incrementado. Ahora, un año después de no ocuparlo, el ayuntamiento ha decidido subirle la nómina. "Nos están vendiendo la moto", expresa Salvador Herrero, portavoz en la oposición de La Veu d'Artana.
Vilar vuelve a ampararse a la Ley y explica: "Mis circunstancias personales no tengo el porqué relacionarlas ni hacerlas públicas". El alcalde ve con "una lógica aplastante" el sueldo; a partir del 1 de septiembre tendrá por presidir a una población que no llega a los 2.000 habitantes. A esto añade que ya no tiene "nada más que decir" en relación con el tema.
"La subida es un complemento que le hace falta para completar el sueldo de antes", denuncia Ferrandis. Este explica que no se puede profesionalizar un cargo en un pueblo como Artana e invita al alcalde a irse de la localidad si así lo ve él: "Esto es un pueblo". Herrero, de acuerdo con este, añade: "Para dirigir este ayuntamiento no hace falta un sueldo astronómico".
Cabe añadir que esta medida se da en plena pandemia de COVID-19, en una situación excepcional. Ambos portavoces están de acuerdo en que en este momento de sensibilización "no es el momento de hacerlo".
El alcalde reitera que se ampara a la Ley
Vila tiene razón cuando afirma que su subida de sueldo está dentro de los límites. Así lo explicaba también el acta: "La asignación de dedicación parcial y retribuciones a la Alcaldía propuestas están dentro de los límites de cuantías aplicables a los municipios de menos de 5.000 habitantes".
En el documento, la concejal de Hacienda, Silvia Llidó, apuntó que la medida "no implicará un incremento al previsto inicialmente, ya que el presupuesto de 2020 cuenta con consignación presupuestaria suficiente para cubrir esta modificación".
El acta fue llevada a Pleno el 30 de julio y fue aprobada por la mayoría absoluta del PP. A partir del 1 de septiembre el alcalde de Artana cobrará un 65% más en un municipio de menos de 2.000 habitantes.