La Generalitat acusa al Gobierno de actuar con poco "sentido común" en la desescalada

Buch, conseller de Interior, lamenta que la Moncloa rechazara las franjas horarias en la 'desescalada' cuando el Govern las propuso
El conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, ha acusado al Gobierno de estar actuando con poco "sentido común" en las decisiones que está tomando en la desescalada del confinamiento por el coronavirus, porque ha considerado que se contradice en sus directrices.
"Cataluña propuso franjas. Madrid dijo que no. Después dijo que sí", ha exclamado el conseller en una entrevista en la emisora catalana Rac1 este sábado, y ha avisado de que cuando el Govern tenga la capacidad para cambiar las franjas, lo estudiarán y se actuará.
En este sentido, ha expuesto el ejemplo de la salida permitida de niños menores de 14 años. Según Buch, no puede ser que el Gobierno haya ordenado para ellos una franja en la que hay la "máxima previsión solar", y a la vez que las administraciones estén recomendando a la gente no exponerse en las horas de máximo sol.
En este sentido, la propuesta de desconfinamiento de la Generalitat prevé, tal y como el propio conseller de Interior explicó el 28 de baril, que la franja horaria destinada al paseo de los niños menores de 5 años sea de 11:00 h a 13:00 h y la de los niños de hasta 13 años, de 16:00 h a 18:00 h.
Fase 1
Preguntado sobre el cambio a Fase 1 para el lunes de Camp de Tarragona, Terres de l'Ebre y Alt Pirineu, ha dicho que la preocupación más grande del Govern es saber a qué condiciones y cambios estarán sometidas estas zonas, por lo que ha pedido que se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE): "Queremos verlo por escrito, porque ya hemos visto que Madrid dice y escribe cosas diferentes".
Sobre cómo se garantizará que los vecinos que están en fase 0 no rompan el confinamiento, ha apelado a la responsabilidad, ha dicho que se tiene que gestionar desde la complicidad y la confianza con la gente, y que los cuerpos policiales harán controles aleatorios. También ha descartado desarrollar un control perimetral como el que se hizo en la Conca d'Òdena (Barcelona) cuando se confinó, porque el número de agentes para todas las carreteras catalanas lo hace "imposible", pero si que habrá dispositivos determinados.
Preguntado por el motivo por el cual han disminuido las actas de denuncia a la gente, lo ha achacado a que antes las personas solo podían salir para trabajar o comprar y era más fácil controlarlo, pero que ahora hay más gente y no se puede controlar con la misma intensidad porque hay muchas casuísticas.
Test a los mossos
Buch ha explicado que desde el 7 de mayo se están realizando pruebas PCR para la detección del Covid-19 a los agentes de Mossos d'Esquadra que están en casa después de haber sido aislados preventivamente o de haber dado positivo, un total de unos 1.500 agentes.
El conseller ha insistido en que Interior quería hacerlos desde el primer día, pero que una orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) y del Ministerio de Sanidad lo retardó.
En cuanto a la posible compensación económica de los agentes de la policía catalana, como la que se anunció para los Bomberos que han trabajado en la lucha contra el COVID-19, Buch ha asegurado que se está buscando una solución porque "no tendría sentido" que unos cuerpos cobraran y otros no.