Moreno acelera las elecciones en Andalucía y echa la culpa a la ‘pinza’ de Vox y PSOE

Hace sólo cinco días, el presidente de la Junta de Andalucía pedía “¡Por Dios!” a Alfonso Fernández Mañueco un “buen resultado” en Castilla y León, porque el siguiente en poner urnas iba a ser él y necesita llegar con “una mayoría suficiente” para no tener que depender de Vox. Todo apunta a que eso puede pasar antes de junio, la última fecha que oficialmente se había apuntado desde San Telmo. Juan Manuel Moreno Bonilla acelera el calendario y se pone como fecha tope febrero para convocar elecciones, si la “pinza” PSOE Vox bloquea la acción de su Gobierno.

“Si a lo largo del mes de febrero, cuando empieza el período de sesiones normalizado, vemos que hay un bloqueo sistemático y permanente de la pinza PSOE y Vox, evidentemente no podremos seguir la legislatura”, avisaba ayer desde FITUR en Madrid, abandonando la calculada ambigüedad en la que Juanma Moreno se ha movido hasta ahora. “Quiero agotar la legislatura pero no quiero ni debo estirar lo que puede ser una agonía”, insiste amagando ya con apretar el botón nuclear de las elecciones.

Vox niega el bloqueo. En noviembre, los de Abascal tumbaron los presupuestos de la Junta, y desde entonces el partido de extrema derecha “balancea” su posición según conviene. Ayer anunciaron que votarían con la izquierda para forzar un pleno extraordinario sobre la gestión de la pandemia. Tras el golpe en la mesa del presidente andaluz, Vox por sorpresa se ha echado atrás, y en un intento de restarle argumentos al presidente de la Junta, se ha abstenido evitando la celebración de ese pleno impulsado por el PSOE. No sólo eso, el partido de Santiago Abascal también ha llegado a sumar sus votos al PP y Ciudadanos para impedir que el parlamento investigue la supuesta financiación ilegal de los populares en Almería. “¿Pinza? Hemos aprobado decretos y Leyes después de los presupuestos”, defiende un alto dirigente de la formación en Andalucía consultado por NIUS, que cree que Moreno “está jugando al ajedrez”.

Claro que el momentazo de la jornada estaba por llegar. Y ese ha sido cuando en FITUR, convertido en escaparate político por un día, han coincidido por primera vez el presidente Juanma Moreno y Macarena Olona. Ya saben, la casi segura candidata de Vox a la Junta de Andalucía, y que sólo espera a la convocatoria electoral para decir que sí.

Un encuentro cargado de pullas cruzadas entre los que muy posiblemente se convertirán en rivales electorales dentro de semanas. Con retranca, Moreno le ha dicho a una Olona vestida de ‘colorao’ de pies a cabeza: “¡Qué roja te veo!”. Ya saben por aquello de la “pinza” con ‘los rojos’ del PSOE. A lo que la dirigente de Vox le ha replicado rápida: “Y yo a ti muy pálido”. Una de las peores pesadillas de los populares es que la izquierda se movilice si Macarena Olona se convierte finalmente en cabeza de cartel de la extrema derecha, restando posibilidades a una victoria contundente del PP en la comunidad autónoma.

Olona viaja prácticamente todas las semanas a Andalucía. Comenzó el año reivindicando la toma de Granada. La semana pasada se desplazó a Almería para hacerse la foto de rigor con un corderito, en plena polémica de la carne y Garzón, y ayer se plantó en el pabellón de Andalucía en Fitur para clamar contra el pasaporte Covid. Y es allí donde coincidió con Juanma Moreno.

El presidente de la Junta de Andalucía lleva meses insistiendo en que su intención es agotar la legislatura. Hasta ayer, cuando abrió la puerta a elecciones inmediatas. En primera fila, su vicepresidente y socio de Ciudadanos, Juan Marín, que se resiste a dar por terminada la legislatura por una cuestión de mera supervivencia. “Yo confío en que no”, decía tras escuchar el aviso de Juanma Moreno en FITUR. Su jefa de filas Arrimadas insiste en que el Gobierno de coalición en Andalucía “está fuerte”. Para los naranjas sería demoledor no poder aguantar el último Gobierno autonómico que les queda, tras dinamitar Murcia, Madrid y Castilla y León.

Pero la maquinaria electoral del PP en Andalucía lleva preparada desde hace meses, y Moreno Bonilla está dispuesto a activarla ya. El viernes reúne a todos sus presidentes provinciales “sin orden del día prestablecido”, aunque nadie duda de que el posible adelanto electoral estará sobre la mesa. Desde el Gobierno de la Junta restan importancia a la cita, y aseguran que ese tipo de reuniones son habituales.

“La cosa está cerca. Si los resultados en Castilla y León son excelentes para el PP, buscarán la excusa del bloqueo para convocarlas en Andalucía”, cuenta a NIUS un diputado andaluz con buena información sobre lo que se cuece en San Telmo.

Una jugada que cuenta con todo el respaldo de Génova, encantada con la perspectiva de sumar otra victoria electoral que impulse a su líder Pablo Casado hasta La Moncloa.