Ábalos defiende la búsqueda de "cauces de expresión" para evitar que el independentismo se salte la ley

Los socialistas buscan fórmulas que encajen con la mesa de negociación entre Gobiernos que reclama ERC
El Gobierno sigue en su intento de lograr el apoyo de ERC para la investidura de Pedro Sánchez. El objetivo ahora es dar con una fórmula para que los republicanos independentistas se sientan cómodos dentro de los márgenes de la Constitución y el Estatut. Esto es, en el marco de las leyes vigentes. En palabras del ministro José Luis Ábalos, miembro de la comisión negociadora con ERC, "se trata de buscar cauces de expresión para que nadie tenga que recurrir a situarse fuera del ordenamiento jurídico".
"Es hora de aceptar que el unilateralismo ha fracasado", es el recado que manda Ábalos a los independentistas. Aunque, al tiempo, admite que el Gobierno no puede hacer como que no pasa nada: "No encarar el conflicto tampoco es respuesta a algo que trasciende a Cataluña y afecta a la institucionalidad del Estado", dice. "Hasta ahora, la forma de abordar este conflicto ha sido en muchos casos la negación del mismo; en otros, la indolencia".
Los socialistas dejan definitivamente atrás la tesis de la "crisis de convivencia". La negociación con ERC parte de una idea: "no negar la existencia del conflicto". Y a partir de ahí, explica Ábalos, "podemos discrepar en el origen, en las causas, pero es evidente que hay un conflicto político y hay que encararlo desde esa perspectiva".
Ábalos entiende que con Esquerra no se trata tanto de hacer "cesiones o concesiones", sino de "superar desencuentros" entre dos formaciones que, recuerda, han estado muy distantes. Y en ello están, pendientes de una tercera cita el 10 de diciembre, después de haber resuelto la segunda con un comunicado conjunto en el que se acordó buscar los "instrumentos necesarios" para encauzar el conflicto.
La búsqueda de "instrumentos"
¿Qué instrumentos? No dice cuales -"de eso estamos hablando"-, la única pista que da es esa citada referencia a "cauces de expresión para que nadie tenga que recurrir a situarse fuera del ordenamiento jurídico". La demanda de ERC es que después de la investidura se constituya una mesa de gobiernos para abordar una solución para Cataluña. Los socialistas han apelado al órgano bilateral de este tipo del que habla el Estatut. Ése puede ser el "cauce de expresión" al que se refiere Ábalos.
El Gobierno sigue interesado en que si hay acuerdo sea "sin demora", pero Ábalos admite que "cada uno tiene sus tiempos" y no puede garantizar que haya investidura en la semana del 16, antes de Navidad.
Con respecto a las quejas de Pablo Casado, que dice seguir esperando una llamada de Pedro Sánchez, Ábalos replica que es una "burda coartada" para seguir en el bloqueo. "Si el PP quiere contribuir a la gobernabilidad, sabe como hacerlo. Y como exigirlo a los demás", afirma el ministro, sin especificar quiénes son esos "demás".