Los intentos de ERC por minimizar a Junts los relegan a una pugna con la CUP por la presidencia del Parlament


Los republicanos ya empezaron las negociaciones por la CUP y ahora confirman que negocian con los 'cupaires' el relevo de Torrent
Los de Sabater insisten en que su prioridad no son "las sillas", mientras que para el grupo de Borràs "lo más normal" sería presidir el hemiciclo
Los equipos negociadores dejan abiertas todas las opciones a la vez que la CUP debate con sus bases qué posición tomar
Las negociaciones por la investidura de Aragonès y la formación del nuevo Govern de la Generalitat se están cociendo a fuego lento. Lo han reconocido los propios partidos implicados, aunque Esquerra Republicana ha dejado entrever su estrategia en varias ocasiones: priorizar a la CUP para minimizar el papel de Junts per Catalunya en las negociaciones y en la próxima legislatura.
El primer gesto ya apuntaba a ello. A pesar de que la candidatura de Borràs fuera la más votada tras la republicana, con tan solo un escaño de diferencia en el Parlament, los de Aragonès decidieron sentarse primero con el grupo de Sabater, al que las urnas del 14-F le otorgaron nueve diputados. En esa primera reunión del 17 de febrero, el equipo negociador de ERC (formado por Vilalta, Jové, Sabrià y Vilagrà) y de la CUP (Riera, Reguant, Juvillà y Pellicer) destacaron "la victoria del independentismo" y pudieron "tomar la temperatura a las relaciones".
ERC y Junts no se sentaron a celebrar su primer encuentro hasta dos días después (con Sánchez, Artadi, Rius, Nogueras y Dalmases en el lado de los de Puigdemont), con los republicanos habiendo dado un primer paso que beneficiaba a los 'cupaires'. Aragonès se ampara bajo el lema de su campaña, 'vía amplia', al que ha dado continuidad incluyendo a En Comú Podem en las negociaciones, a pesar de los vetos cruzados que mantienen Albiach y Borràs. Una vía amplia que está cobrando un mayor sentido tras las palabras de Junqueras este jueves: su grupo negocia con los 'cupaires' la posibilidad de que estos presidan el Parlament.
Todas las opciones abiertas
"Forma parte del proceso de negociación", ha asegurado en una entrevista en Catalunya Ràdio, días después de que Artadi reclamara la presidencia de la cámara catalana para Junts al considerar que "sería lo más normal", algo que Vilalta compartió públicamente después. De hecho, la lógica dicta que ERC presida el nuevo Ejecutivo de la Generalitat en tanto que ganador entre los grupos que conforman mayoría absoluta; también que alguien de la candidatura de Borràs sustituya a Torrent, el president de la Mesa saliente, siguiendo la fórmula de la anterior legislatura. No obstante, los gestos de los republicanos, la ausencia de nombres por parte de los de Puigdemont y los debates entre las bases anticapitalistas reflejan que todas las opciones siguen abiertas.
Preguntadas por ello, fuentes de ERC aseveran que no han propuesto la presidencia del Parlament y que los anticapitalistas tampoco la han reclamado como requisito para investir a Aragonès, pero reconocen que "es evidente" que las negociaciones incluyen este punto. A lo que la CUP agrega: su prioridad no son "las sillas", sino garantizar que en la próxima legislatura "se pueda hablar de todo". Por el momento, se han producido dos reuniones entre cada uno de los tres grupos, que deben cerrar la composición de la Mesa de la cámara el 12 de marzo como máximo, fecha que marcará el inicio de la XIII legislatura catalana.