Sánchez retendrá el control del CNI para evitar que pase por Podemos

Suenan tres perfiles distintos para liderar el servicio secreto: el general Ballesteros, la número dos de Margarita Robles y la actual directora interina
Mandos del centro prefieren que el organismo pase a Presidencia para evitar intermediarios
Vincular el CNI directamente a Sánchez evitaría el pacto entre PSOE y Podemos para informar de cualquier decisión ministerial al Consejo de Ministros
Tres nombres suenan con fuerza para dirigir el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en el nuevo gobierno de coalición entre el PSOE y Podemos, que será anunciado el próximo domingo. El primero es un general llamado Miguel Angel Ballesteros. Un perfil militar que ya trabajó con Sánchez en Moncloa. El segundo es el de Esperanza Casteleiro, exagente del CESID y una de las personas de confianza de la actual ministra de Defensa, Margarita Robles. El tercero tiene también un perfil civil y marca la línea continuista con la anterior dirección. Es Paz Esteban López, la mujer que asumió el control del servicio secreto de forma interina tras la jubilación del general Félix Sanz Roldán.
Sin embargo, hay una incógnita todavía más importante. ¿Seguirá el servicio de inteligencia dependiendo del Ministerio de Defensa o pasará al control directo del gabinete del presidente? Fuentes del propio CNI confirman a NIUS que dentro del organismo, la preferencia es depender directamente de la Presidencia del Gobierno. Según explican otras fuentes, eso evitaría intermediarios a la hora de compartir determinada información. Sin embargo, hay otro motivo estratégico. El acuerdo firmado entre el PSOE y Podemos para su gobierno de coalición refleja que todas las decisiones vinculadas a los ministerios deben ser informadas en el Consejo de Ministros. Sin embargo, vincular el CNI directamente a la presidencia del Gobierno serviría, sobre el papel, para esquivar ese compromiso.
De forma tradicional, el CNI ha dependido directamente de la vicepresidencia del Gobierno. Eso, cuando solo había una y su figura era realmente preponderante en el Ejecutivo. Con la batalla abierta entre Maria Dolores de Cospedal y Soraya Saenz de Santamaría dentro del PP, el servicio secreto dejó de estar en manos de la vicepresidenta para pasar al ministerio de Defensa. Fue un reparto de poderes dentro del partido que supuso un cambio administrativo para el CNI. En ese momento, el máximo responsable era un militar de alto rango, pero parte de la plantilla adscrita al centro tiene condición civil.
En este caso queda una segunda incógnita ¿Seguirá Margarita Robles en Defensa? y sobre todo ¿Seguirá Margarita Robles en el ministerio sin mantener el control del CNI, uno de sus principales activos? Las fuentes consultadas por este diario indican que finalmente se mantendrá en Defensa, pese a que Robles habría tanteado la posibilidad de cambiar de departamento y ocupar la cartera de Exteriores. Algo que la alejaría por completo del control del servicio secreto, con independencia de si se mantiene en Defensa o pasa a Presidencia. Sin embargo, a primera hora de esta mañana el diario El País daba como seguro que la jurista Arancha González Laya ocuparía finalmente Exteriores
El favorito desde hace meses
Así, hay un nombre que suena por encima de los demás desde hace al menos cinco meses para liderar el nuevo CNI: es el del general Miguel Angel Ballesteros, que fue ya director del Departamento de Seguridad Nacional (DSN) en Moncloa con Pedro Sánchez. Ballesteros es un experto en geopolítica y terrorismo yihadista, profesor universitario y para algunos, tiene un marcado perfil teórico, Algo que agrada a una parte del servicio secreto, que cuenta con una importante plantilla de analistas de datos, pero que le hace restar simpatías entre los operativos de campo.
Su principal competidora parece una mujer de la máxima confianza de Margarita Robles, su jefa de gabinete en Defensa, llamada Esperanza Casteleiro. Ex agente del CESID, embrión del actual CNI, Casteleiro cuenta con una doble baza: por un lado es una persona bien vista por el partido, con un perfil civil y por otro lado y según explican fuentes que conocen bien su trabajo, tiene experiencia en inteligencia digital y ciberterrorismo, una de las ramas que marcará el desarrollo del CNI por medio del Centro Criptológico Nacional en los próximos años. Ella parece la mejor colocada entre los candidatos para afrontar ese reto digital.
La terna de candidatos se completa con la actual directora interina, llamada Paz Esteban López, la que fue mano derecha del general Félix Sanz Roldán y que supone la rama más continuista con la anterior dirección del centro. Pese a los cambios en el Gobierno, tanto PP como PSOE han entendido de forma histórica que el CNI no es una institución que soporte bien los cambios, sobre todo por lo sensible y confidencial de su trabajo. De hecho, Sanz Roldán se mantivo al frente del servicio secreto tanto con gobiernos socialistas como con los del Partido Popular. Sin embargo, queda por ver si Pedro Sánchez mantiene esa misma tendencia y ratifica a la actual directora interina, o si por el contrario, prefiere un cambio que esté más en la sintonía del PSOE.