Rescate en Kabul: España busca a varios colaboradores antes de que caigan en manos talibanes

Efectivos españoles han salido del perímetro de seguridad del aeropuerto empotrados en caravanas conjuntas con otros países
El objetivo es localizar y facilitar el acceso hasta los aviones a esos colaboradores y sus familias antes de que se cierre de forma definitiva el acceso al aeropuerto
Los traductores del Ejército español habían pedido su salida del país en varias ocasiones desde 2015
Quedan cinco días para que las fuerzas occidentales tengan que abandonar el país y el objetivo del Gobierno español es sacar del país al mayor número de personas posibles antes de que quede en manos de los talibanes. Para ello, Exteriores y Defensa trabajan con un listado de colaboradores y sus familias. Guías, traductores o simples proveedores de servicios que colaboraron en su momento tanto con la legación diplomática española como para las tropas desplegadas en el país y que ahora, con la vuelta de los talilbanes al poder, se ven con su vida seriamente comprometida cuando los ojos de occidente se aparten del país.
Es por ello que según fuentes conocedoras de la operación, tanto los militares españoles como los miembros del GEO y la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional llevan días trabajando junto con efectivos de varios países, EEUU e Italia de forma principal, para crear de un corredor de seguridad de trate de agilizar el acceso de estos colaboradores al aeropuerto, la única zona que se encuentra todavía bajo el control militar de los aliados.
Además, policías y militares de distintos cuerpos han montado varias caravanas conjuntas, con el objetivo de rescatar y trasladar hasta el aeropuerto tanto a aquellos que todavía no han podido acceder al aeropuerto como a sus familias. En el caso de España, el traslado de todos los que corren el riesgo de ser señalados por los talibanes como colaboracionistas se complica, ya que la principal zona de acción de las tropas españolas mientras estuvieron desplegadas en Afganistán está a tres días en coche de la capital.
Un traslado que ahora se antoja imposible según las fuentes consultadas por NIUS, dado que el ejército talibán controla los accesos por carretera a Kabul, donde según las mismas fuentes, se están produciendo chequeos continuos para evitar que los posibles colaboradores de las fuerzas occidentales alcancen finalmente el aeropuerto. En algunos casos, los traductores afganos que utilizó el ejército español llevan reclamando su salida del país desde 2015 sin que España hubiera tomado decisión alguna.
Ahora, un portavoz del Gobierno talibán anunció anunció ayer la prohibición que los islamistas radicales han hecho para que los afganos no se acerquen a las inmediaciones del aeropuerto, lo que dificultará todavía más el acceso a los aviones para cualquier persona que no haya conseguido acceder ya al perímetro de seguridad y que no tenga pasaporte extranjero.