“Bruno Brasil”: el chef y amigo de Dani Alves que le acompañaba la noche de la presunta violación


El amigo personal del deportista se puede convertir en un testigo clave, ya que envió mensajes a la prima de la víctima tras la agresión preocupándose por lo sucedido
Durante la estancia del deportista en el baño, el amigo de Alves preguntó también a las acompañantes de la víctima si “entraban a ver”
Después, las cámaras de seguridad grabaron a Alves tomando una copa solo hasta marcharse del local
Su nombre es Bruno Brasil, o al menos el apelativo profesional con el que se le conoce en redes sociales. Y según el testimonio de la denunciante de la presunta violación cometida por el el deportista Dani Alves, él era la persona que acompañaba al futbolista la noche del 30 de enero en la discoteca Sutton de Barcelona. Según ha podido conocer NIUS, la declaración de la víctima no le identifica con nombres y apellidos, pero sí aporta un dato concreto para su localización: la cuenta de una red social desde la que momentos después, el cocinero envió un mensaje a la prima de la víctima preocupándose por lo sucedido y aportando su dirección en la Ciudad Condal. Un mensaje que está desde entonces en manos de los Mossos d’Esquadra.
Así, se da la circunstancia de que una de las personas más cercanas a Dani Alves pueda convertirse en uno de los testigos más relevantes del proceso, ya que su testimonio no está ligado directamente al entorno de la víctima, si no al del presunto agresor. En sus redes sociales, el cocinero aparece constantemente vinculado al futbolista, hablando de su nutrición o comentando sus viajes juntos. El día uno de enero, 48 horas después de la presunta violación, el joven colgó una imagen fechada en Barcelona. El día tres, estaba ya en México, donde Alves viajó también para jugar con el equipo de Los Pumas.
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Según la versión recogida por la policía autonómica, este cocinero era la persona que acompañaba a Alves en el reservado de la discoteca Sutton donde sucedieron los hechos. Sin embargo, su papel según la denunciante fue distinto, ya que en ningún momento se propasó con las tres chicas. De hecho, en un momento de su denuncia, la joven explica que el cocinero se mantuvo con sus acompañantes y llegó a preguntar si era pertinente entrar en el baño para ver lo que estaba pasando (“Oye, entramos a ver”), a lo que las otras dos testigos se negaron al desconocer lo que estaba sucediendo en el habitáculo.
"Tenemos su dirección"
Según la documentación del caso, la víctima y el futbolista pasaron 16 minutos en el baño de la zona VIP donde presuntamente se produjo la agresión. Después, tal y como avanzó El Mundo, el jugador salió solo del habitáculo y se marchó a otra barra a tomar una copa, para ausentarse más tarde del local. La víctima, por el contrario, tardó medio minuto más en salir del baño -tal y como reflejó en su declaración- y después comunicó lo sucedido a sus acompañantes y a la seguridad de la discoteca, que activó el protocolo contra este tipo de delitos. Eso provocó la llegada de los Mossos d’Esquadra.
Según relató ante la policía autonómica catalana, fue en ese momento cuando este cocinero, de nacionalidad brasileña, le mandó un mensaje una de las acompañantes de la víctima para indicarle que “para cualquier cosa que necesitásemos, teníamos su dirección”. Lo que no ha trascendido todavía es si los Mossos le han tomado declaración sobre lo sucedido o si se marchó del país sin prestar testimonio al igual que sucedió con Alves.