27 ministros y altos cargos en los últimos 10 años: así son las puertas giratorias en los consejos del Ibex 35

La cifra se dispara al tener en cuenta además a alcaldes de grandes ciudades o diputados autonómicos
Un estudio del Observatorio de Responsabilidad Corporativa destaca que ninguna empresa dentro del selectivo español tiene una normativa específica para evitar este fenómeno
La Oficina de Conflictos de Intereses ha denegado hasta 2021 solo 11 peticiones de políticos para trabajar en la empresa privada, de 444 solicitudes
27 ministros o altos cargos de distintas administraciones, sentados en los consejos de administración de las empresas que componen el Ibex 35, es decir: las compañías con mayor volumen de negocio en la bolsa española. Ese es el resultado del conteo elaborado por el Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa para su informe anual sobre el selectivo Español, donde se refleja que 15 de las 35 empresas que lo componen tienen entre sus consejeros a personas que han ocupado cargos de responsabilidad en la Administración durante los últimos diez años.
Lo primero que pone de relevancia el trabajo de campo es la “laxitud” con la que la Oficina de Conflicto de Intereses ha rechazado solo 11 peticiones de las 444 cursadas hasta el ejercicio que comprende el informe, 2021, pese a que “gran parte de las autorizaciones corresponden a empresas fuertemente vinculadas con la Administración Pública, siendo especialmente llamativos los casos del sector bancario y el sector energético”.
Según la normativa española, los políticos que han tenido cargos de responsabilidad en ministerios y otros estamentos oficiales deben guardar una cesantía de dos años hasta pasar a una empresa privada en el ámbito en el que hayan tenido competencia. Es lo que se conoce como “período de enfriamiento”. Sin embargo, los autores del informe aplican un espectro más amplio y fijan dentro de este fenómeno a 27 personas que ocuparon cargos públicos durante los últimos diez años, y que ahora ocupan un puesto en alguno de los consejos de administración de las empresas del Ibex. La cifra aumentó el pasado año en dos componentes, la exministra Fátima Báñez, responsable de Empleo y que ahora trabaja para la farmacéutica Rovi e Isabel García Tejerina, exministra de Agricultura y que ahora ocupa cargo en Iberdrola.
¿Significa eso que el resto de los consejos de administración del Ibex no tienen relación directa con la clase política? No. En 16 de los 20 que quedan fuera de esta estadística, no hay “puertas giratorias” tal y como aparecen definidas en este estudio, pero sí consejeros “con experiencia relevante en la función pública, especialmente técnicos y abogados del Estado o gestores a diversos niveles. En cuatro casos, ACS, Repsol, Meliá Hoteles y Acerinox, hay consejeros que sí han ocupado altos cargos según los términos mencionados”, pero llevan fuera de la Administración pública más de 10 años.
En cualquier caso, las legislaciones internacionales marcan un equilibrio complicado en el caso de las puertas giratorias. Por un lado, se limitan las estancias de los políticos en la vida pública para evitar que sus cargos sean prácticamente vitalicios. Pero por otro, se plantean los posibles conflictos de intereses para una persona que se traslada a la vida privada con sus contactos en las administraciones e instituciones públicas como principal activo. Según un estudio de la Unión Europea citado en el estudio, el 30% de los empleados de las instituciones de la UE pasan a trabajar como lobistas una vez que cesan en sus puestos públicos. Algo que no es ilegal pero sobre lo que las instituciones europeas alertan a los Gobiernos para que estén vigilantes. En España, se modificó la normativa en 2015 para ampliar por ejemplo los puestos sometidos a un período de cesantías.
Las cifras nacionales
En España y según los datos del organismo creado en 2004, que cuenta entre sus miembros con entidades como Ayuda en Acción, Cruz Roja, Cáritas o la Universidad Complutense de Madrid, es Enagás la empresa que cuenta con mayor vinculación de sus consejeros con el sector público, ya que cuatro de los miembros de su cúpula han formado parte del Consejo de Estado (las ex ministras Ana Palacio e Isabel Tocino), han sido ministros, como José Blanco o directores generales como María Teresa Arcos Sánchez, que fue directora general de Telecomunicaciones.
En segundo lugar con tres consejeros está el BBVA, con Félix Caruana que fue director general del Banco de Pagos Internacionales, José Manuel González Páramo, Consejero de Gobierno del Banco Central Europeo, o Ana Leonor Revenga, que ocupó varios cargos en el Banco Mundial. AcelorMittal tiene entre sus consejeros a Karel De Gucht, exministro belga, Michel Wurth, que fue responsable del Banco Central de Luxemburgo, y a Etienne Schneider, exministro de economía y comercio del ducado centroeuropeo.
En el consejo de Caixabank se sentaba en 2021 Cristina Garmendia, exministra de Ciencia e Innovación, en Indra el exministro Miguel Sebastián, Jaime Pérez Renovales en el Banco Santander (fue subsecretario de Presidencia del Gobierno de Mariano Rajoy), la exministra Beatriz Corredor figura en Red Eléctrica y Ana Palacio también en PharmaMar, por poner varios ejemplos.
El estudio advierte además de que la cifra sería mayor si se incluye dentro de este criterio a responsables políticos de otras administraciones como alcaldías de grandes ciudades, altos cargos de partidos políticos o diputados de distintas cámaras. “Algunos casos destacados en el ejercicio 2021 son los de Maurici Lucena o Josep Antoni Durán i Lleida (AENA) Josu Jon Imaz (Repsol), José Montílla (Enagás), Angel Acebes y Antonio Miguel Carmona (Iberdrola) o Josép Piqué (Amadeus)”, explican los autores del estudio.