El interrogatorio del fiscal a la víctima de 'la manada de Sabadell': "¿Está segura? ¿Intentó escapar?"
El Ministerio Público preguntó a la víctima de violación grupal si estaba "segura" de lo que narraba
La abogada del principal acusado ha recrudecido el interrogatorio y el juez le ha llamado la atención por "escarbar" en el relato
El agresor la condujo con violencia a una nave abandonada en la que presuntamente la violó con dos hombres más por turnos
"¿Está segura de eso? ¿Nos puede concretar a qué se refiere cuando la llevaba a la fuerza? ¿Pidió ayuda en algún momento? ¿Llevaba usted la ropa puesta? ¿Intentó escapar en algún momento?". Este es parte del interrogatorio con el que el fiscal ha tratado de corroborar de forma reiterada todos los detalles de la presunta violación por turnos de 'la manada' de Sabadell, obligando a la víctima a reconstruir varias veces los hechos que se han juzgado hoy.
El representante del Ministerio Público se ha dirigido a la joven de 20 años -que sigue en tratamiento psicológico desde que sucedieran los hechos cuando tenía 18- con constantes interrupciones cuando relataba los momentos más duros de los hechos, retrocediendo en el relato y redundando en detalles que ya había explicado; después, ésta ha debido retomar el relato una y otra vez.
La víctima ha declarado en la primera sesión del juicio contra cuatro de los seis presuntos agresores, para quienes el fiscal pide penas de entre 37 años y medio y 40 años y medio de cárcel por agresión sexual con penetración, a uno de ellos en calidad de autor y a los otros tres como cómplices o cooperadores necesarios.
El ataque sucedió la madrugada del 2 al 3 de febrero de 2019, cuando un hombre que no ha podido ser identificado la agarró del cuello, la puso contra la pared y la agredió sexualmente, tal como ella misma ha relatado. Luego, la condujo contra su voluntad hasta una nave abandonada, una antigua sucursal bancaria ocupada, donde perpetró con dos hombres más la presunta violación múltiple por turnos.
Una y otra vez
A pesar de lo desgarrador del relato de la joven, que ha comparecido durante una hora, el fiscal ha cuestionado varios aspectos de su testimonio. Tras insistir en si estaba "segura" de lo que narraba, le ha pedido que aclarase a qué se refería con que la forzaron a mantener relaciones sexuales "con violencia", pese a que previamente había explicado que acudió a la nave contra su voluntad y que, una vez en su interior, la agarraron con fuerza por el cuerpo y la cara para violarla y obligarla a realizar felaciones.
También le ha preguntado, por ejemplo, que cómo sabía que sus presuntos agresores discutían si no entendía el idioma (hablaban en árabe), que si "ahora tiene claro" la participación de alguno de ellos en los hechos o si recuerda que "eyacularan" dentro de ella. "¿Cómo termina este suceso?", ha espetado el fiscal cuando la víctima, con la voz ahogada en lágrimas, describía minuciosamente cómo presuntamente la violaron.
La abogada del principal acusado, Mohamed Alibos, se ha encargado de endurecer aun más el interrogatorio al que el fiscal ha sometido a la víctima. Le ha llegado a preguntar si no recordaba haber mantenido "relaciones consentidas" con los procesados o por qué no "chilló" o "llamó a un timbre" mientras era conducida a la nave. "Tenía miedo", ha aseverado la víctima antes de que el juez llamara la atención de la letrada varias veces por intentar "escarbar" con cuestiones que ya habían quedado claras, como qué ocurrió primero, la penetración vaginal, la anal o la bucal.
El interrogatorio a Nevenka Fernández
Por momentos, el interrogatorio a la víctima ha recordado al que se vio sometida Nevenka Fernández hace dos décadas, y que acabó con el relevo del fiscal por "acoso procesal a la denunciante". En el juicio contra su acosador, el alcalde de Ponferrada (León) en ese momento, Ismael Álvarez, el Ministerio Público le espetó a la por aquel entonces concejal del PP, entre otras cosas: "No es la empleada de Hipercor que le tocan el trasero y tiene que aguantarse porque es el pan de sus hijos".