La mayoría del TC ve delito de ultraje en el llamamiento a "quemar la puta bandera"


El magistrado Andrés Ollero propuso considerarlo libertad de expresión, pero el pleno no le apoyó
Ahora otro magistrado redactará una nueva sentencia que lo considerará delito
La división estaba anunciada. El Pleno del Tribunal Constitucional votó ayer en contra de una ponencia del magistrado Andrés Ollero que consideraba que decir "hay que quemar la puta bandera" es libertad de expresión. Seis magistrados votaron en contra y cinco a favor. Finalmente, otro miembro del TC se hará cargo de redactar otra sentencia que lo considerará delito de ultraje a España.
Los magistrados estudiaban el recurso de un sindicalista gallego, Pablo Fragoso que fue condenado, por un delito de ultraje, a pagar 1.260 euros por la Audiencia Provincial de A Coruña. Según la sentencia, durante una manifestación de protesta por las condiciones laborales del servicio de limpieza, Fragoso, megáfono en mano, gritó dos frases: "Aquí tedes o silencio da puta bandeira", y "hai que prenderlle lume á puta bandeira".
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El magistrado Ollero se encargó de revisar la sentencia en amparo e hizo una propuesta en la que consideraba esas frases -negadas por el sindicalista- derecho a la libertad de expresión.
Su ponencia se apoyaba en otra del Tribunal de Derechos Humanos en Estrasburgo, que anuló una condena por quemar fotos del rey a dos jóvenes a los que además, el Estado tuvo que indemnizar.
No sólo eso, en una de sus últimas decisiones, el TC amparó al cantante de Def Con Dos, César Strawberry, por varios tuits en los que hablaba del secuestro de Ortega Lara o la vuelta de los GRAPO. En ese momento, en febrero, los magistrados consideraron que se trataba de un ejercicio de libertad de expresión.
Pero esta vez, el resultado del debate cambia, y el Pleno no ha aceptado el texto. Tras el debate, Ollero, enmarcado en el sector conservador, renunció a redactar una nueva, así que finalmente se encargará otro magistrado de ese bloque, aunque él se desmarcará en esta ocasión.
Fuentes del Constitucional aseguran que no está todo dicho, pero el recorrido del debate, deja claro que el sentido de la sentencia será condenatorio y que esas expresiones se considerarán un delito de ultraje. En unas tres semanas, se votará la nueva resolución.
La salida de Fernando Valdés quitó fuerza al bloque progresista
La salida del Tribunal Constitucional del magistrado Fernando Valdés, por un un caso de presunta violencia de género, ha mermado el bloque progresista del Tribunal Constitucional. Si antes eran cuatro magistrados con esa sensibilidad entre doce, sin él, son tres.
De hecho, su renuncia ha influido también en la decisión de avalar la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley mordaza. Él era el ponente y proponía una sentencia que limitara mucho más las devoluciones en caliente, que en este mismo pleno han sido declaradas constitucionales a propuesta del presidente del tribunal Juan José González Rivas, del sector conservador.