Villarejo obtiene permiso del tribunal para irse a casa por su evidente cansancio: "Vaya imagen que estoy dando"
Empezó a declarar el lunes y estaba previsto que terminara este jueves
El último interrogatorio a Villarejo, el de su abogado, se celebrará este viernes
El comisario jubilado ya tenía dispensa para no acudir por las tardes al juicio
Entornaba los ojos, encogía los hombros y resoplaba. Los síntomas de cansancio del comisario jubilado José Manuel Villarejo eran evidentes tras cuatro días de declaración como acusado principal en las tres piezas del caso Tándem por las que se le está juzgando en la Audiencia Nacional. Así que su declaración, que debería haber terminado este jueves, con las preguntas de su abogado, concluirá mañana, tras obtener permiso del tribunal.
El comisario jubilado, que en esta causa -tres en una- se enfrenta a 109 años de cárcel, comenzó a declarar el lunes. Este jueves, sobre el mediodía, sus gestos de agotamiento eran ostensibles, y cuando las acusaciones han terminado de preguntar, la presidenta del tribunal, Ángela Murillo, ha hecho una pausa, que él ha recibido con un "se lo agradezco".
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Tras el receso, el abogado Antonio García Cabrera, ha solicitado que su interrogatorio se dejara para el viernes. "Como ha podido observar la Sala, tras cuatro días continuados de declaración, y especialmente hoy, se veía al señor Villarejo bloqueado y no está en condiciones, según me manifiesta, por el cansancio que va acumulando e incluso por un pequeño dolor de cabeza", ha explicado el letrado antes de solicitar que se le dejara irse "a casa".
Ni la Fiscalía ni el resto de partes han puesto pegas y los jueces han aceptado porque "verdaderamente" veían que "se aprecia cierto cansancio en el acusado".
Concedido el permiso, Villarejo ha respondido: "Se lo agradezco a sus señorías, vaya imagen que estoy dando, pero bueno...".
La vista ha continuado con el siguiente acusado, Gervasio Cañabate, uno de los detectives que trabajó para Villarejo.
Dispensa para no declarar por las tardes
La de este jueves no es la primera dispensa que obtiene el comisario jubilado por parte del tribunal. El martes 11 de enero, su abogado también pidió que no declarara por las tardes por el "cansancio extremo" que suponían las dobles sesiones de mañana y tarde.
La sala aceptó que sólo declarara por las mañanas y como ha hecho este jueves, él mostró su agradecimiento y anunció que se iba a casa para meterse "en la cama". Las partes han ido interrogando a otros acusados por las tardes, mientras las mañanas se han dedicado exclusivamente a él.
Las sesiones, que empiezan a las diez de la mañana, se interrumpen a mediodía y se retoman por la tarde. Este jueves, en cualquier caso, ya no habrá sesión. La vista se retomará el viernes con el último interrogatorio a Villarejo, el de su abogado.