Adolescencia, testosterona y agresividad


El papel que juega la testosterona en las violaciones en grupo por parte de adolescentes que se están produciendo en Alemania.
La relación entre testosterona y agresividad existe, pero no es causal.
La agresividad tiene que ver sobre todo con el grado de socialización del adolescente.
¿Qué papel juega la testosterona en las violaciones en grupo por parte de adolescentes que se están produciendo en Alemania?
La respuesta es difícil de contestar en términos generales porque cada individuo tiene su proceso y sus peculiaridades.
MÁS
La testosterona no es la causa de la agresividad
Son ya muchos los estudios que han demostrado la relación entre testosterona y agresividad y cómo el boom que durante la adolescencia se produce de esta hormona masculina por excelencia, favorece la conducta agresiva.
Para entender bien qué es la adolescencia es importante abordarla como un proceso esencialmente psicológico y social que debe diferenciarse de la pubertad
Pero los expertos están bastante de acuerdo en que la relación entre testosterona y agresividad, no implica necesariamente causalidad.
Por eso, sin desestimar el papel que juegan las hormonas en todo este periodo, para entender bien qué es la adolescencia es importante abordarla como un proceso esencialmente psicológico y social que debe diferenciarse de la pubertad (que comprendería exclusivamente los cambios físicos y hormonales).
Como explica el psicólogo Walter Arias Gallegos (2013) en su artículo Agresión y violencia en la adolescencia, este periodo en el que el individuo pasa de un estado de niño a adulto joven, constituye un proceso de individuación extremadamente delicado que lleva a la consolidación de la personalidad del adolescente. De modo que los retos a los que se enfrenta el adolescente serían:
- La reestructuración y consolidación de su imagen corporal
- El proceso de independencia y autonomía económica y social
- El establecimiento pleno de la identidad
- El desarrollo y asunción de un sistema de valores
- La programación del futuro
- El desarrollo de su identidad psico sexual
Adolescencia, esa gran desconocida
La complejidad de este proceso es incuestionable, sin embargo llama la atención que no se haya empezado a investigar la adolescencia de manera rigurosa y sistemática hasta hace muy pocas décadas. Es ahora cuando realmente se puede hablar de la psicología del adolescente.
La verdadera causa de estas conductas agresivas tiene que ver sobre todo, con el grado de socialización del adolescente.
Tratar de explicar los episodios de violencia (sexual o no) protagonizados por adolescentes y que saltan a las portadas de los periódicos cada vez más a menudo, constituye un auténtico reto para psiquiatras, psicólogos, sociólogos, antropólogos y educadores.

Porque sin dejar de contemplar el papel que desempeñan las hormonas en las conductas agresivas propias de esta etapa del desarrollo, los expertos coinciden en que la verdadera causa de estas tiene que ver sobre todo, con el grado de socialización del adolescente.
El cómo se vive la adolescencia, depende mucho de cómo se han vivido etapas precedentes
Como nos recuerda Arias Gallego, “el cómo se vive la adolescencia, depende mucho de cómo se han vivido etapas precedentes. Por eso, la familia y la socialización son fundamentales para consolidar el acoplamiento del adolescente al grupo al que pertenece”.
El temido bucle agresividad-conducta antisocial
De hecho son ya numerosos los estudios que relacionan la agresividad en los adolescentes y la conducta antisocial de los mismos, generada por una deficiente socialización en al ámbito familiar y escuela (esto puedo incluir o no maltrato infantil, pero también sencillamente una deficiente implantación de un sistema de valores por parte del entorno del niño).
El rechazo social,muchas veces es la causa de la conducta agresiva en los adolescentes y jóvenes
Se produciría entonces una especie de espiral o bucle en el que el bajo grado de socialización puede provocar a su vez un bajo rendimiento académico, que a su vez puede derivar en otros problemas psicológicos como un autoconcepto negativo, una autoestima baja, y al final, el rechazo social, que muchas veces es la causa de la conducta agresiva en los adolescentes y jóvenes.
La solución no es endurecer las leyes
La solución a la violencia por parte de los adolescentes no está en ampliar las condenas
Todo esto explica por qué en Alemania, por el caso concreto de la cadena de violaciones grupales a manos de niños extranjeros (búlgaros, turcos, sirios y libaneses) se está tratando de frenar la campaña social que pide una rebaja de la edad penal de los 14 a los 12 años.
Los expertos se apoyan en evidencias científicas, en estudios que vienen a demostrar que la solución a la violencia por parte de los adolescentes no está en ampliar las condenas o rebajar la edad penal de los menores, sino en abordar estos casos desde la educación, el ámbito social y la familia.