Padres y profesores denuncian el "caos" en los institutos con los alumnos aprobados en junio

El 95% de los estudiantes de bachillerato y el 65% de los de la ESO han dejado de ir a clase, según la FAPA Giner de los Ríos
Educación de Madrid defiende que con el 'experimento' de 'adelantar' septiembre han aprobado XXX chicos, 13.000 más que un año antes
El absentismo entre los estudiantes que ya han aprobado el curso se ha generalizado en muchos colegios e institutos este junio en la Comunidad de Madrid. Los alumnos han dejado de ir a clase porque ya no se imparte nueva materia ni se les examina. En muchos centros "reina el caos", según profesores y familias. Y todo como consecuencia directa del adelanto de los exámenes de septiembre a junio, que se estrenó el año pasado. Tras dos “cursos experimentales”, la Consejería anuncia que hará una evaluación de los resultados para comprobar si es una buena medida y se implanta definitivamente. Analizamos la situación.
Las consecuencias. Para poder adelantar los exámenes de septiembre a junio es necesario que estos últimos acaben antes. De hecho, a finales de mayo los alumnos de la Comunidad de Madrid habían ya terminado las clases ordinarias. Solo los que han suspendido tienen clases de refuerzo con vistas a la convocatoria última para examinarse.
- Para los alumnos que han suspendido es una "presión enorme tener que estudiarse todo el temario del curso en sólo 15 días", asegura la portavoz de Educación en Madrid de CCOO, Isabel Galvín.
- "Los alumnos están perdiendo un mes entero para dar el mismo temario que se daba antes, puesto que ahora las clases terminan en mayo", añade Galvín.
- "Faltan recursos educativos en los centros para atender al alumnado que ha aprobado", señala el presidente de la federación madrileña de ampas (FAPA) Giner de los Ríos, Camilo Gené. "Muchas aulas de los institutos no han podido separar a los que han aprobado de los que no lo han hecho y se molestan unos a otro. Tanto que muchos centros están invitando a las propias familias para que sus hijos se queden en casa", añade.
- Sólo en casos contados, institutos y colegios reconocen atender de forma separada a los que han aprobado con clases de refuerzo, sesiones de cine, lectura, ajedrez o fotografía.
Las cifras. La Consejería de Educación no ha facilitado datos oficiales sobre el absentismo en junio, pero según la FAPA Giner de los Ríos, el 95% de alumnos que han aprobado ya el curso de bachillerato y el 65% de la ESO han dejado de asistir a clase en los institutos en la Comunidad de Madrid. La encuesta se ha realizado a través de llamadas telefónicas a los institutos.
Las razones. El nuevo calendario escolar se estrenó el curso pasado después de que se constatase el poco éxito de aprobados en los exámenes de septiembre: el 58% de los estudiantes de Bachillerato suspensos y el 49% de los de la ESO no superaba las pruebas tras el verano.
Los defensores. El cambio de fecha en los exámenes permite que los alumnos puedan preparar la recuperación con sus propios profesores, además tienen más fresco el temario, según José Ramón López, profesor de un colegio concertado. La medida facilita, además, a los que terminan bachillerato incorporarse a la Universidad en el inicio de curso, aseguran desde la consejería.
Los detractores. Son muchos dentro de la comunidad educativa que están en contra de esta medida.
- Los profesores. El sentir de muchos docentes lo resume Ana Gómez, profesora de un instituto al sur de Madrid. "Es imposible que los que han suspendido y no han sido capaces de estudiar en todo el curso, lo hagan en tres semanas. Y con el resto de alumnos que ha aprobado, ¿qué hacemos?", se pregunta. "Es mejor para eso que se queden en sus casas", añade.
- Los padres. "Mis hijos dicen que para ver una película, prefieren no ir al colegio. Son demasiados ratos muertos y sienten que ya no pintan nada allí, así que no van", asegura Esther Méndez, madre de tres niños escolarizados en un colegio concertado.
Los resultados. La Consejería de Educación señala que desde el principio se tomó esta medida como "experimental" y que tras los dos primeros cursos llevarán a cabo una evaluación para comprobar si está siendo positivo para el sistema educativo madrileño.
- Por ahora sólo hay sobre la mesa las cifras del año pasado: 13.000 alumnos más pasaron de curso el año pasado respecto al anterior, según la Consejería.