El asesino de Marta Calvo pide perdón por su comportamiento: "Es la segunda vez que me pasa"

Su abogado mantiene que no fue un homicidio: "fue una muerte accidental"
La acusación particular asegura que "el principal objetivo sigue siendo encontrar el cuerpo"
Jorge Ignacio P.J. se niega a declarar ante la jueza, que le ha enviado a prisión provisional
El asesino confeso de Marta Calvo ha pedido perdón por su comportamiento. Después se ha acogido a su derecho a no declarar y ha guardado silencio ante la titular del Juzgado 3 de Alzira que este viernes se encontraba de guardia. Su abogado, Óscar Fernández, espera a que el juzgado número 6 se haga cargo del caso durante los próximos días. Entonces, según ha dicho el letrado: "ya veremos si declaramos o no."
Jorge Ignacio P.J. ha guardado silencio aunque, durante cinco horas confesó a los investigadores de homicidios de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ser el autor de la muerte de la chica, de 25 años, y que después descuartizó su cuerpo y lo arrojó por distintos contenedores. Por eso la jueza le ha enviado a prisión provisional comunicada y sin fianza acusado de un delito de homicidio.
A la salida de los juzgados, el abogado de la defensa ha declarado ante la prensa que su cliente está colaborando con la investigación aunque ha afirmado: "nosotros negamos la comisión del delito de homicidio. Entendemos que fue una muerte accidental" y ha negado que estén intentando ganar tiempo para dilatar el hallazgo del cuerpo o dilatar el procedimiento.
Palabras a las que ha respondido la abogada de la familia materna de la víctima, Pilar Jové, que ejerce la acusación particular: "la investigación continúa y el principal objetivo sigue siendo encontrar el cuerpo. Él dice que es la segunda vez que le pasa -según sus manifestaciones- es que tiene muy mala suerte", señalaba con ironía.

El hombre, colombiano de 38 años, se entregó voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil el miércoles de madrugada. Sabía que llevaba casi un mes en busca y captura. Confesó estar detrás de la desaparición de Marta Calvo. Según su versión, quería celebrar su cumpleaños y se citó con la víctima en su piso en la localidad de Manuel. Asegura que tuvieron una especie de 'fiesta blanca' en la que consumieron cocaína y durante horas mantuvieron relaciones sexuales.
Mantiene que Marta falleció repentinamente, posiblemente por un fallo cardíaco, y que él se asustó porque tenía antecedentes penales por tráfico de drogas. Además, era la segunda vez que le pasaba. En abril la Policía Nacional le había investigado por su presunta relación de una prostituta, en circunstancias parecidas, pero había resultado absuelto.