Un español supera el COVID-19 en Cuba y pide ayuda para regresar a España

Santi se contagió en Madrid y al llegar a Cuba fue ingresado
“No entiendo como países como Francia e Italia programan vuelos para repatriar y España no es capaz”
La embajada tan solo les reubica en vuelos de otros países con destinos como Paris o Roma
Santi Viejo había viajado a Madrid en marzo. “Adelanté mi vuelo a Cuba porque no me gustaba la situación”, nos cuenta este extremeño afincado en La Habana desde hace dos años. Trabaja y vive en un hotel de la capital. Al llegar decidió ponerse en cuarentena voluntaria, tres días después empezaron los primeros síntomas.
La segunda mitad del mes del marzo la ha pasado en un hospital de la Habana. "La atención que he recibido ha sido espectacular”, reconoce Santi, aunque afirma que no es como un hospital español. Su estancia en el hospital no fue tan dura como la de muchos otros, aunque reconoce que los primeros días lo pasó bastante mal. “Durante dos días necesité oxígeno y medicación”.
Al recibir el alta, el protocolo del país establece que deben pasar 15 días de cuarentena en un hotel que se encuentra junto al hospital. A su salida, el hotel donde vive y trabaja había cerrado, su empresa lo reubicó en otro hotel donde hasta la fecha se encuentra confinado junto a otros trabajadores y clientes. Mientras se recuperaba del COVID-19 en el hospital muchos españoles residentes en el país volaron a España en vuelos de repatriación. “El último vuelo salió el 31 de marzo, mientras yo estaba en el hospital”, afirma Santi.
“Si otros países lo hacen, no puede ser tan difícil”
Desde entonces, al igual que otros españoles, ha tratado de que la Embajada española les ayude a volver a España. “No nos ayudan en nada”, asegura Santi. Otros países sí que están programando vuelos para sus ciudadanos que viven en Cuba. “La Embajada nos ofrece los asientos que quedan libres en esos vuelos pero tenemos que contestar en la misma llamada”. El principal problema con el que se encuentran para volar con esos vuelos es el destino, uno de ellos iba a Roma y otro a París. “¿Cómo vamos luego a nuestras ciudades si esta todo cerrado?”, se pregunta Santi. Además la embajada no costea esos billetes de avión que alcanzan los 1.000 euros. No entienden porqué España no puede programar vuelos de repatriación como Francia e Italia. “Si otros países lo hacen, no puede ser tan difícil”, asegura Santi.
Por el momento Santi se encuentra confinado en un hotel, siempre y cuando no lo cierren. “De suceder esto no tengo donde quedarme”, asegura. Reclama una solución para él y todos los españoles que viven allí. Además añade que se han sentido abandonados por parte de la Embajada de España en Cuba.