El mito de la invasión madrileña: las localidades valencianas no detectan llegadas masivas de turistas

Los datos indican que el tráfico ligero ha disminuido un 80,13% respecto al año anterior
Localidades como Cullera estan practicamente desiertas
En plena Semana Santa la costa mediterránea se ha blindado para evitar la llegada de turistas a segundas residencias. Ante la posibilidad de esa “avalancha” cada ayuntamiento ha puesto en marcha diversas medidas. La mayoría han optado por controles en todas las carreteras de acceso a las poblaciones de costa o incluso obstáculos en la carretera para evitar su uso.
En esos controles de acceso es donde se producen la mayoría de sanciones para aquellos que deciden saltarse el confinamiento. En Cataluña los Mossos han interpuesto 88 denuncias por traslados a segundas residencias. Además, señalan que en el interior de los maleteros se encontraban grandes cantidades de comida.
Lo mismo sucede en la ciudad de Alicante. Los agentes se centran en las zonas cercanas a los supermercados. El pasado miércoles identificaron a 17 personas no residentes en la ciudad. La mayoría eran de Madrid y al ver los controles de acceso a los supermercados trataron de dar la vuelta y marcharse para no ser identificados. Al igual que en las inspecciones realizadas en 75 autobuses, donde se denunció a cuatro foráneos, tres procedentes de Guadalajara y una de Madrid, señala el Ayuntamiento en un comunicado.

Alicante alcanzó el pasado jueves la cifra más alta de sanciones, 156 en total, entre los que se interceptaron personas de Madrid, Albacete, Teruel, Valencia, Jaén y Santa Cruz de Tenerife. Pese a estos datos el edil de Seguridad, José Ramón González, ha expresado su agradecimiento a los ciudadanos "la inmensa mayoría está teniendo en estos difíciles momentos una conducta ejemplar y responsable”, y ha incidido en “el excepcional trabajo que está realizando la Policía en los controles para hacer cumplir todas las medidas con mucha entrega y profesionalidad”.
Otras localidades con gran afluencia turística en periodos vacacionales como Oropesa, Peñíscola o Almenara optaron esta semana por cortar algunas carreteras colocando bloques de hormigón en las zonas de acceso a sus playas. El pasado jueves la Delegación del Gobierno les instó a retirarlos, por lo que continuarán tan solo los controles de los agentes en los accesos.
En zonas de la costa de Valencia como Cullera la imagen que podemos encontrar es de completa tranquilad. La mayoría de sus calles y playas estan desiertas. Así lo confirman los vecinos quienes dicen "no haber visto movimiento". La mayoría de apartamentos estan cerrados y tan solo permanecen abiertos los comercios de primera necesidad.
Pese al numero de sancionados en otras zonas, los datos indican que el tráfico ligero ha disminuido un 80,13% respecto al mismo periodo del año anterior. “No se han producido afluencias masivas en zonas turísticas” asegura la Delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Gloria Calero.