Los dermatólogos recomiendan tomar el sol durante el confinamiento para no quemarnos después

Los expertos recomiendan tomar el sol al menos entre 10 y 20 minutos al día
Cuando el confinamiento finalice la exposición al sol deberá ser gradual y con la precaución y la protección adecuada
Los dermatólogos y nutricionistas explican cómo obtener la vitamina D sin salir de casa, cómo proteger la piel este verano y qué alimentos podemos consumir
Tomar el sol desde la ventana, terraza o balcón mientras dure el confinamiento es, según los expertos, casi obligatorio. Nuestro organismo necesita los rayos solares para fabricar vitamina D, un sustento necesario para mantener nuestro sistema inmunológico y salud ósea en un nivel óptimo.
En condiciones normales, el tiempo de exposición solar necesario para cargar vitaminas se consigue sin dificultad. Basta con ir a trabajar, al colegio o pasear para absorber esos rayos de sol que el cuerpo necesita. En cambio, encerrados en casa, las posibilidades se reducen. Algunas personas apenas están recibiendo radiación solar, por ello, los expertos recomiendan dedicar unos minutos al día a tomar el sol.
Según Ramón de Cangas, doctor en Biología Funcional y Molecular, "se estima que el 50% de la población está en riesgo de padecer deficiencia de vitamina D a pesar de la síntesis cutánea y de la dieta" a raíz del confinamiento. Pero, ¿cómo podemos evitarlo sin salir de casa?
En NIUS hablamos con dermatólogos, nutricionistas y expertos en el cuidado de piel para que nos hagan un repaso de cómo obtener la vitamina D sin salir de casa, cómo proteger la piel de caras a la temporada de verano y qué alimentos podemos consumir para compensar la falta de radiaciones solares.
¿Qué nos puede pasar si estamos muchos días sin que nos de el sol?
La vitamina D, como el resto de vitaminas, es necesaria y fundamental para la vida. Sin embargo, la dermatóloga Rosa Tabarner, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología, asegura que si somos personas sanas, varias semanas sin sol incluso más de un mes sin una exposición tan continuada no nos va a suponer una consecuencia grave en neustro salud. "El 80% - 90% de la cantidad de vitamina D que necesitamos se sintetiza a partir de una reacción química que tiene lugar en nuestra piel gracias a la incidencia de una fracción muy determinada de la radiación solar, por lo que el sol resulta necesario", explica Tabarner.
¿Qué pasa si estoy ingresado, encamado y no puedo salir del hospital?
La dermatóloga explica que para aquellas personas que están ingresadas en hospitales o los pacientes institucionalizados en residencias con un riesgo de tener la vitamina D baja deben tomar suplementos farmacológicos que ayudan a compensar esa falta de sol: "las personas con insuficiencia renal, con obesidad, con hipertensión, con enfermedad cardiovascular o pacientes institucionalizados que no pueden salir, deben tenerlo controlado".
"Tomar el sol unos 10-20 minutos al día en una zona pequeña de nuestra cuerpo ya es suficiente"
¿Hace falta estar muchas horas al sol para absorber mucha vitamina D?
No, con 15-20 minutos al día o cada tres días en una zona pequeña de nuestra cuerpo ya es suficiente para tener la vitamina D necesaria. Es un error pensar que debemos estar horas y horas al sol para sintetizar la vitamina D. La dermatóloga explica que a partir de los 20 minutos nuestro cuerpo se satura y por mucho que estemos expuestos al sol ya hemos obtenido la vitamina D necesaria, nunca se va a acumular.
¿Cómo puedo conseguir la vitamina D que el cuerpo necesita sin salir de casa?
Podemos conseguir la vitamina D que necesitamos en un balcón, en una terraza e incluso a través de una ventana siempre y cuando el cristal esté abierto. Todo depende de la latitud en la que estemos, de las horas del día y de lo moremos que seamos. Es importante hacerlo de forma paulatina, ya que también podemos quemarnos estando confinados desde el balcón.
¿Qué alimentos compensan la falta de vitamina D?
Hay un pequeño porcentaje de un 15% - 20% de la vitamina D que proviene de nuestra dieta. El nutricionista Ramón de Cangas explica que podemos hacer una dieta equilibrada a base de lácteos enriquecidos, pescado azul, salmón, atún, cereales, champiñones o la yema del huevo. Todos estos alimentos tienen una cantidad importante de vitamina D. Pero hay que tener cuidado, porque el cuerpo también se satura. Rosa Tabarner explica que quizás los veganos puedan tener un poco más de dificultad al compensar la vitamina D con la alimentación.
"Cuando el confinamiento finalice la exposición al sol deberá ser gradual y con la precaución y la protección adecuada"
¿Nuestra piel será más sensible cuando podamos salir?
Ramón de Cangas recomienda que cuando el confinamiento finalice "la exposición al sol deberá ser gradual y con la precaución y la protección adecuada". En condiciones normales nos iríamos bronceando de forma paulatina, casi sin darnos cuenta. La constante exposición al sol iría creando un bronceado que generaría una síntesis de melanina que actuaría como protección natural ante una quemadura solar.
Rosa Taberner avanza que el problema será que probablemente todo el mundo "va a querer salir el primer día y la piel no habrá tenido tiempo de prepararse o fabricar esa defensa".
Además, la experta explica que la atmósfera estará mucho más limpia. "La polución actúa como filtro y quizás es equivalente a un día nublado, si la atmosfera está más limpia puede ser que estemos más expuestos, pero la diferencia será poca", asegura Tabarner.
¿Cómo podemos ir preparando la piel para no quemarnos?
Los dermatólogos recomiendan ir dando dosis de sol a la piel y una vez se levante el confinamiento, aseguran que es importante "no dejarse llevar por esas ganas de aire libre" y no pasar el primer día largas horas expuestos al sol sin protección. "Debemos actuar con sentido común y utilizar mucha protección, no solo cremas, también gafas, gorras, viseras... habrá que protegerse bien para no dañar la piel", sentencia Rosa Tabarner.
Desde el punto de vista nutricional, Ramón de Cangas recomienda "incrementar la ingesta de alimentos ricos en carotenoides (zanahorias, tomate, pimiento…), ácidos grasos omega 3 de cadena larga ( pescados azules como salmón o caballa..)puede ser interesante.