Los docentes reclaman que se mantengan las ratios y los 35.000 profesores de refuerzo para el próximo curso


El próximo curso las ratios en infantil y primaria serán de 25 alumnos por aula; en ESO, de 30, y en bachillerato, de 35
Celaá ha pedido a las comunidades que mantengan el próximo curso a los 35.000 profesores que fueron contratados por la pandemia
Si algo 'bueno' ha traído la pandemia ha sido en los colegios. La obligación de mantener una distancia de seguridad para evitar contagios ha acarreado un puñado de cambios, algunos de ellos reclamados por los docentes desde hace años. Durante este curso que ahora acaba, las clases de infantil, primaria y primero y segundo de la ESO han sido de 20 alumnos por clase, mientras que las de tercero y cuarto de la ESO, se han mantenido en 30, y en bachillerato, en 35. Según los docentes, la reducción de las ratios ha permitido recuperar el pulso educativo que se había perdido el curso pasado cuando los centros cerraron sus puertas en marzo debido a la covid.
Pero el panorama cambia de cara al próximo curso. En el documento 'Propuesta de medidas de prevención, higiene y promoción de la salud frente a la covid-19 para centros educativos en el curso 2020-2021' el Ministerio de Educación establece reducir la distancia de seguridad de 1,5 a 1,2 metros. Eso significa que cabrán más alumnos por aula y que en secundaria, a partir de tercero de la ESO, no tendrán que combinar las clases presenciales con las 'online', después de que la experiencia haya demostrado que ha sido un fracaso.
MÁS
Educación ha fijado que para el próximo curso las aulas de infantil y primaria tengan las mismas ratios de antes de la pandemia: en infantil, 25, y en primaria, hasta 30 (aunque la mayoría de las regiones establece que sean 25). En secundaria las ratios se quedan en 30 en ESO y en 35 en bachillerato.
Bajada de ratio, mejora del rendimiento
Desde el Consejo de directores de colegios de infantil y primaria reclaman que se mantengan estas ratios reducidas incluso aunque mejore la situación sanitaria. "A lo largo de este curso, hemos observado en la práctica cómo el mantener esas ratios bajas nos ha permitido trabajar en dos cuestiones concretas: por un lado, mantener un seguimiento curricular de los estudiantes, que ha repercutido en una mejora del rendimiento académico, y, por otro lado, mantener un seguimiento emocional de todos ellos. Una cuestión que ha sido muy importante en un año como este, viniendo de las circunstancias de las que veníamos", asegura Oscar Martín Centeno, director del colegio público Santo Domingo en Madrid y portavoz del Consejo de directores.
La insistencia ahora de los profesores es la misma: que se mantengan las mismas ratios de este curso y no volver a las de antes, con aulas masificadas, donde es difícil atender a todos. "Creemos que para los siguientes años sería muy conveniente mantener esas ratios porque eso nos va a permitir mejorar el rendimiento académico. Además, atendiendo al hecho de que todos los estudiantes son diferentes, de esta manera se pueden marcar una serie de itinerarios de aprendizaje personalizados para que cada uno de los alumnos encuentre lo que necesita y los docentes podamos atenderles de la manera más adecuada posible".
35.000 profesores de refuerzo
Otra de las mejoras que ha traído la pandemia han sido los 35.000 profesores de refuerzo que fueron contratados para este curso. La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha pedido a las comunidades que los mantengan para el que viene con el fin de garantizar la calidad de la educación y la presencialidad plena en todas las etapas educativas. "Algunas de las medidas adoptadas con carácter extraordinario por la pandemia deben permanecer para consolidar el gran cambio que estamos impulsando en nuestro sistema educativo", ha señalado. "Las comunidades autónomas deben comprometerse a que, al menos, se mantengan los recursos docentes de refuerzo con los que han contado este año".
El Gobierno destinará este año a las comunidades 13.400 millones de euros extraordinarios para la lucha contra la pandemia. Además, pondrá a su disposición los 10.000 millones de euros del mecanismo europeo REACT-UE, un fondo de inversión rápido que permitirá inyectar este mismo año 8.000 millones y otros 2.000 millones en 2022 en educación, sanidad y políticas sociales. Las comunidades han presentado ya sus peticiones para el reparto de este mecanismo europeo y recibirán casi 1.750 millones en dos años para educación.
Este curso, el número de profesores de refuerzo ha sido dispar dependiendo de cada comunidad. Algunas los han utilizado para desdobles y otras, para clases de refuerzo para aquellos alumnos que peor iban. Si en Andalucía (gobernada por el PP) un instituto de secundaria con 800 alumnos ha tenido de media siete profesores por centro, en la Comunidad de Madrid (también del PP) ha habido tres.
"Gracias a los profesores de refuerzo, los resultados han sido mejor que nunca en primero y segundo de la ESO, donde las clases se han mantenido presenciales", señala el presidente la Asociación de Directores de Institutos Públicos de Madrid (Adimad), Esteban Álvarez. "En Madrid, el 95% de los alumnos de estos dos cursos han aprobado todo, frente a algo más del 80% que lo hacía en años pasados", asegura.
Madrid ha sido la única comunidad que despidió a sus profesores de refuerzo en Navidad. "En otras comunidades están viendo ahora cuántos van a mantener para el próximo curso, pero nadie discute que tendrán que seguir habiendo profesores de refuerzo", subraya Álvarez.
La constatación de que las clases semipresenciales a partir de tercero de la ESO no han funcionado este curso hace que sea necesario mantener en los centros a estos docentes para el próximo. "Los chavales están superando el 'shock' que les ha supuesto las clases semipresenciales. A un adolescente le ha sido muy difícil seguirlas desde su casa. Los centros hemos tenido que adaptar los niveles de exigencia. Muchos contenidos se han visto por encima para que los chicos no se vieran perjudicados. Si hubiéramos mantenido el mismo currículo, el porcentaje de aprobados a partir de tercero de la ESO hubiera sido un desastre", reconoce el presidente de Adimad.
Las consecuencias de la pandemia "no pueden pagarlas" los alumnos, aseguran los profesores. El curso próximo habrá que volver a la normalidad y para ello los alumnos van a necesitar apoyo, señalan. "No se puede pasar de cero a 100 en un segundo y pretender que luego vas a hacer el trabajo inverso en nada de tiempo", señala Álvarez.