Estas son la bebidas veraniegas que más y menos calorías tienen


143 calorías separan un vaso de horchata (231) de uno de cerveza (88)
La más saludable para hidratarse y con cero calorías es el agua, aunque no sepa ni huela a nada
Hidratarnos en verano es fundamental para mantener un nivel adecuado de líquido en el organismo y permitir que el cuerpo pueda autorregular su temperatura cuando los termómetros se disparan hasta los 40 grados. De lo contrario podríamos sufrir un golpe de calor. Pero hay que tener cuidado con lo que bebemos para refrescarnos porque, salvo el agua, todo aporta calorías y no en la misma cantidad.
Horchatas y bebidas con café
A los que eligen la horchata para aplacar la sed, sepan que un vaso de este producto elaborado con chufas trituradas, maceradas y mezcladas con agua y azúcar, tiene un 2,4 % de grasas, un 12 % de azúcares y 231 calorías. Es lo que dice el informe realizado por al Organización de Consumidores y Usuarios. A la horchata le siguen las bebidas de café. Depende mucho, eso sí, del tipo de leche o la cantidad de azúcar añadido. No es lo mismo un café con hielo que alguno de los diferentes preparados que ofrecen los supermercados o en las heladerías. Su aporte es de unas 170 calorías en el caso de un envase de los del 'súper'.
Tinto de verano, refrescos y granizados
Cien calorías se ahorran los que eligen al rey del verano, como dice su propio nombre. Un refrescante vaso de tinto de verano, esa mezcla de vino tinto con gaseosa o refrescos de naranja o limón, según gustos, contiene aproximadamente 125 kilocalorías. Los refrescos, con todas sus burbujas y su sabor, y los granizados de frutas, también contienen mucha azúcar. Alrededor de 150 kilocalorías para los segundos y unas 132 los primeros.
Zumos, cerveza y... agua
Le siguen los zumos, aunque, como en el caso de los cafés, no es igual uno recién exprimido (con todas las vitaminas y minerales de la fruta) que uno concentrado o un néctar de frutas, que están muy cargados de azúcar y contienen solo un 50% de fruta, en el mejor de los casos. Unas 113 kilocalorías por un vasito.
Frente al mito de la cerveza y las calorías se impone la realidad. Una clara con limón engorda más que una caña, 125 kc frente a 88. Está muy rica pero el refresco con el que se mezcla le añade un buen puñado de calorías. No ocurre igual en el caso de la clara con gaseosa, que al contener menos azúcares aporta solo 88 Kc por vaso. Las bebidas refrescantes con extractos de té tampoco son excesivamente calorícas: unas 94 kilocalorías por cada 33 cl (una lata).
Finalmente está la bebida estrella no solo en verano. La que no engorda, refresca, nutre y se hace indispensable en los días de calor. No sabe a nada y no huele a nada. La bebida más vital, el agua, contiene cero calorías.