La explicación de por qué confinan Ourense y Barbadás: “El virus era como una bomba atómica”


A partir de esta medianoche, nadie podrá entrar ni salir de la ciudad de Ourense y del municipio vecino de Barbadás, salvo por causa justificada
La incidencia acumulada en los últimos catorce días en la ciudad de Ourense es de 439 casos por cada 100.000 habitantes
“Era el momento de tomar estas medidas. La expansión del virus era como una bomba atómica, una bomba vírica”. Así describe la situación que vive Ourense uno de los expertos que asesora a la Xunta de Galicia en la epidemia del coronavirus. En una rueda de prensa, el conselleiro de Sanidade y varios especialistas han explicado por qué a última hora de este martes decidieron confinar perimetralmente la ciudad de Ourense y el municipio de Barbadás. A partir de la medianoche del jueves, nadie podrá entrar ni salir de ambos concellos salvo por causas sanitarias, laborales o educativas justificadas.
Según ha señalado el conselleiro, las medidas se toman después de constatar el progresivo aumento de casos positivos en la ciudad de Ourense. Solo en los últimos tres días, la capital ha registrado 138 nuevos casos, hasta situarse en los 501 activos. La incidencia acumulada en los últimos siete días es de 254 casos por cada 100.000 habitantes. Si tenemos en cuenta los últimos 14 es de 439 casos. Unas cifras que son entre cuatro y cinco veces superiores a las del resto de Galicia. Otro dato llamativo es que solo en esta ciudad se concentran el 42,6% de los positivos de toda la provincia.
Los especialistas han explicado que el virus se ha ido extendiendo de forma preocupante desde la ciudad a otros municipios limítrofes. Por eso, han decidido también restringir la movilidad en el vecino concello de Barbadás. En este ayuntamiento, la incidencia acumulada es de 280 casos en siete días.
Barbadás y Ourense no son los únicos ayuntamientos que tendrán nuevas restricciones a partir de este jueves. Al igual que ocurrió el pasado viernes con Ourense, las autoridades han decidido prohibir las reuniones de no convivientes en espacios públicos y privados también en Barbadás, O Barco de Valdeorras, Verín y en nueve ayuntamientos de la comarca de O Carballiño (Beariz, Boborás, O Carballiño, O Irixo, Maside, Piñor, Punxín, San Amaro y San Cristovo de Cea).
Los expertos han explicado que con estas restricciones se busca crear un perímetro de seguridad con el resto de concellos y comarcas limítrofes. Aún así, el conselleiro de Sanidade ha recalcado que la situación de Ourense está lejos de la de Madrid y de las recomendaciones que recoge el Ministerio de Sanidad. "Con estas decisiones estamos anticipándonos", ha dicho García Comesaña.
Las UCI, a un tercio de su capacidad
En los últimos días, ha habido un aumento progresivo de la presión hospitalaria. Sin embargo, según han indicado las autoridades en esta comparecencia, de momento no hay riesgo de colapso. Actualmente, hay 50 ingresados en el hospital de Ourense, 9 en Verín y 4 en O Barco de Valdeorras. La ocupación de las camas UCI está a un tercio de su ocupación. “La capacidad de su asistencial en Ourense está totalmente garantizada”, ha indicado el gerente del Servizo Galego de Saúde, José Flores Arias.
Los especialistas han hecho un llamamiento a la ciudadanía. Han pedido responsabilidad y han explicado que el "comité clínico ni juzga ni castiga, somos un comité de profesionales sanitarios y hacemos recomendaciones basadas en la evidencia científica recogida en otras comarcas y otras zonas".
Han lamentado los intentos por saltarse las restricciones, en alusión a la huida de personas desde Ourense a otros municipios limítrofes con el objetivo de reunirse con personas no convivientes. "Esto no es un juego de picaresca, de cómo puedo escapar, es una partida de vida o muerte", ha dicho uno de los doctores que forma parte del comité de expertos.
Esto no es un juego de picaresca, de cómo puede escapar, es una partida de vida o muerte