La Gomera salta a la Fase 1: "Contenta, miedo, incertidumbre… Pero ilusión de venir a trabajar"

Mascarillas, distancia de seguridad, y una mampara en la barra, son algunas de las medidas que han puesto los empresarios
El aforo limitado a un tercio es una de las condiciones para los pequeños comercios
San Sebastián de La Gomera amanecía esta mañana con un ambiente especial, en las calles de la capital gomera se respiraba cierta normalidad.
A las 5.45 de la mañana abría la primera terraza, la de la cafetería Óscar en la plaza. Un bar de toda la vida, al que suelen acudir los trabajadores a desayunar, y los vecinos del pueblo a tomar café.
"Hemos abierto a las 5.45 y la mañana está fluyendo bien. Nosotros hemos decidido abrir porque funcionamos con la gente del pueblo” decía Yaniel, el dueño. Y añadía, se nos conoce como “el bar del pueblo".
Y desde primera hora, el bar del pueblo no ha parado de recibir a sus clientes de toda la vida. Los trabajadores que pasaban a por su bocadillo antes de ir al trabajo, los jubilados que pasaban a por su “cortado” y conversar un rato con los amigos, los que salían a hacer deporte y paraban a reponer fuerzas…
Las 5 mesas que ha podido montar Yaniel, han sido un constante ir y venir de clientes:“Teníamos ganas ya, después de tanto tiempo encerrados”, decía uno de ellos.
Yaniel ha sido el primero en abrir, y tras él, abría también Luis, con sus 6 mesas que han tardado pocos minutos en llenarse: “Café, café, café…Nada más abrir a las 8.30 ya estaban las mesas llenas”, decía Luis, el encargado.
Y los clientes, felices de poder disfrutar de nuevo de las terrazas: "He pedido un café que me va a saber a gloria", decía una de las clientas.
En el Kiosko de los Pajaritos, en pleno paseo marítimo, todas las mesas llenas desde mediodía. Pepe, el dueño, asegura que “reservaron todas las mesas desde el jueves. Para hoy, mañana y pasado”
Manteles de un sólo uso, pizarra con el menú en lugar de la carta, mascarillas, distancia de seguridad, y una mampara en la barra, son algunas de las medidas que ha tomado este empresario que no ha parado de servir comida hasta pasadas las cinco de la tarde.
Las terrazas, lo más esperado, pero también las reuniones con familiares y amigos. Hasta 10 personas guardando distancia de seguridad, pueden reunirse a partir de hoy en La Gomera, El Hierro, La Graciosa, y Formentera.
“Teníamos muchísimas ganas de estar juntas todas para tomar una copita, comer…” Afirmaba una de las clientas del restaurante.
“Estamos celebrando por fin que podemos reunirnos sin miedo. Estamos felices”, comentaba su amiga.
Pero no sólo las terrazas han abierto hoy en La Gomera, también lo han hecho los pequeños comercios.
Tiendas de ropa cómo la de Manuela, han recibido de nuevo a sus primeros clientes: “Feliz, estoy super feliz hoy…Parece que empiezo hoy después de 36 años!”
Anabel, tiene una tienda de decoración, y todavía se emociona de pensar en esta vuelta a la normalidad: “Son un montón de cosas encontradas: contenta, miedo, incertidumbre… Pero ilusión, ilusión de venir a trabajar”
Y clientes que ya esperan para entrar en algunos comercios:“Después de tanto tiempo, deseamos entrar a comprar algo a mirar…”
“Venimos a dar una vuelta y a ver si compramos algo. Tenemos que esperar porque hay que entrar de 3 en 3 y hay personas dentro”
El aforo limitado a un tercio es una de las condiciones para los pequeños comercios. Además, las tiendas de ropa se las ingenian para desinfectar las prendas: “Tengo la vaporeta y la voy a pasar, y he encargado una lampara de luz ultravioleta…Y lo que no pueda, lo dejaré 48 horas en cuarentena” dice Manuela, propietaria de una boutique.
También los bares y restaurantes van adaptándose a las nuevas normas:
Ya hoy por la mañana pasaron las autoridades y nos explicaron cómo debía ser lo de las mesas. Yo tengo 10 mesas, y al 50% de aforo son 5 mesas. Además respetando las distancias y vigilando que los clientes también cumplan las medidas”, comentaba Raité, dueña de un bar.
Muchos empresarios han decidido abrir, pese a que no están del todo seguros de que salga rentable. Otros, sin turismo y con las terrazas al 50%, directamente no van a abrir porque no lo ven viable. Tomás tiene un restaurante de 2 plantas, y sólo 4 mesas en la terraza: “No voy a abrir. Esperaré a la fase 2 o la fase 3”.
Tampoco es rentable para los establecimientos turísticos, aunque algunos complejos de apartamentos, han decidido abrir: “Lo hacemos un poco psicológico, para intentar dar esa normalidad. No, rentable es. Al menos intentar generar, por pequeños que sean ingresos” dice José María Morales, gerente de un establecimiento turístico.
Rentable o no, La Gomera ya camina un paso por delante hacia esa ansiada “nueva normalidad”.