Salto a la inversa: un inmigrante intenta 'salvar' la valla de Ceuta para volver a Marruecos por el covid


Agentes de la Guardia Civil frustraron el intento de huida del joven africano cuando intentaba saltar la doble valla que separa ambos países
Ibrahim, el muchacho senegalés, ya intentó bordear a nado sin éxito el espigón del Tarajal
Puede haber una explicación a que se rompan los esquemas hasta ahora vivido: la pandemia del COVID-19 y el cierre de las fronteras con el país marroquí
Resulta muy incomprensible que una persona inmigrante que haya llegado a España en una travesía arriesgada a bordo de una patera a través del mar quiera saltar la valla desde Ceuta a Marruecos alterando los roles establecidos. Sin embargo, puede haber una explicación a que se rompan los esquemas: la pandemia del COVID-19 y el cierre de las fronteras con el país marroquí.
Efectivos de la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta dedicados al control del perímetro fronterizo de la ciudad autónoma interceptaron el marte por la noche a un inmigrante residente en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) local en las inmediaciones del doble vallado con la intención de saltarlo para regresar a Marruecos, un hecho "inaudito" y "sin explicación aparente", según han explicado fuentes de la Benemérita.
Los agentes sorprendieron a Ibrahim, el joven africano, procedente de Senegal, cuando intentaba saltar la doble valla fronteriza pero al revés: desde Ceuta hasta Marruecos para volver a su país de origen, Senegal. Su comportamiento no es normal. Aunque, al menos, en una ocasión, intentó bordear a nado el espigón del Tarajal para regresar a Marruecos, también sin éxito, según publica el Faro de Ceuta.
El inmigrante y "sin ninguna causa pendiente en España que pudiese motivar su intento de abandonar el país" fue detectado por las cámaras de vigilancia de la frontera e interceptado por una patrulla del Instituto Armado cerca de la doble valla de 8,2 kilómetros de longitud que separa Ceuta del país marroquí.
Los guardias civiles de servicio lo evitaron, conociendo así que se trataba de un residente del CETI. Llegó durante el confinamiento sin que se supiera bien la vía de entrada ya que apareció en las dependencias policiales, ingresando en el CETI. .
Desde la declaración del estado de alarma y el cierre del paso del Tarajal, el pasado 13 de marzo, se ha repetido asiduamente que ciudadanos de nacionalidad marroquí intenten bordear la carrera y a nado los espigones marítimos norte y sur en los que termina el perímetro fronterizo.
Un marroquí superó esta semana la alambrada
Los agentes que estaban de servicio lo interceptaron evitando ese salto a la inversa, dejando constancia de lo sucedido. Pero esta semana se ha producido otro hecho que tiene en común un intento de escapada y la valla. Ese fue el punto elegido por un marroquí atrapado en Ceuta para marcharse de regreso a su país, superando la alambrada y ayudándose de un gancho. En su caso sí que pudo volver a Marruecos, dejando de ser uno de tantos atrapados que llevan desde el pasado 13 de marzo sin poder volver a sus hogares. Primero sorteó la primera de las vallas y con un gancho saltó la segunda.
Que se sepa es el único caso de alguien que se haya fugado por esta zona, ya que la amplia mayoría busca hacerlo a nado, bordeando los espigones del Tarajal y de Benzú. Muchos lo consiguen y otros son interceptados antes de la meta por los agentes operativos de servicio en ambas bahías.
Un total de 97 marroquíes en una nave ceutí
El Gobierno de Ceuta mantiene alojados en una nave acondicionada en los polígonos comerciales ubicados junto a la frontera a un total de 97 súbditos del Reino alauita (55 hombres y 42 mujeres) que se quedaron atrapados en la ciudad tras la clausura del paso y no fueron incluidos en las expediciones de repatriación autorizadas por Marruecos desde entonces.
El Ejecutivo local, que preside Juan Vivas, ha pedido en repetidas ocasiones sin éxito al Gobierno central que asuma la atención a ese colectivo, cuyo número se mantiene más o menos estable porque, según las las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, "los que consiguen huir de vuelta a su país se compensan con las personas que logran entrar irregularmente a nado o en motos acuáticas y otras embarcaciones recreativas".
La Benemérita ha vallado durante los últimos días parte de la playa más cercana al espigón del Tarajal con el fin de evitar que, aprovechando la acumulación de bañistas, las personas que desean salir de Ceuta irregularmente, puedan sorprender a los agentes de guardia, que de esta forma han ganado más margen de maniobra de respuesta.