Repartidores de Glovo: "Los traficantes encuentran en la plataforma una vía para repartir la droga"

La policía ha interceptado varios envíos de sustancias ilegales a través de estos servicios
Los sindicatos denuncian que las empresas de envío a domicilio no facilitan medidas de protección a sus riders
Seis horas en la comisaría. Ese fue el dardo envenenado que recibió un rider (repartidor) de Glovo en un servicio el pasado fin de semana. Recogió el paquete en un domicilio particular, fue parado por un control de policía y los agentes descubrieron que dicho paquete contenía sustancias estupefacientes. "Perder 6 horas de tu trabajo es lo de menos, el problema es que pasas 6 horas detenido en una comisaría con todo lo que ello comporta", explica Nasir, un compañero suyo. Además, la empresa no les ofrece ningún servicio de soporte legal. Ni siquiera un teléfono de contacto.
Mientras las autoridades realizan las comprobaciones pertinentes, el transportista pierde al menos media jornada laboral. "Legalmente se conoce como autor mediato, es decir, el delincuente manipula a una persona que no sabe que está cometiendo un delito", explica Roberto Castro, abogado y portavoz del sindicato Free Riders. La retención del repartidor de Barcelona no es un caso aislado, la compraventa de drogas está encontrando una salida en estas plataformas. "Los traficantes y consumidores se encuentran con el problema de que no pueden hacer llegar las sustancias y cada vez más utilizan esta alternativa", añade Castro.
"Muchos repartidores son inmigrantes no regularizados que no pueden trabajar en ningún otro sitio. Tienen miedo de ser fichados por la policía, ser relacionados con esa droga y deportados en sus países de origen", explica Dani Gutiérrez, añade de Riders por Derechos. Esta práctica ya supone una irregularidad dentro del servicio, Glovo la persigue, pero lo cierto es que algunos riders alquilan su cuenta a trabajadores sin papeles que carecen de protección y rostro ante un problema legal.
Miedo al contagio y a las drogas
"La situación supone un estrés psicológico extra. Además de verse expuestos al virus, algunos paquetes les generan mucha incertidumbre", explica Roberto Castro. La mayoría desconoce lo que llevan dentro: "Yo nunca abro un paquete privado", explica Nasir. Este rider ha decidido quedarse en casa durante el confinamiento: "Nuestro servicio no es imprescindible. Sólo trasportamos paquetes sospechosos, alcohol, tabaco y pizzas. Los pedidos a la farmacia son los menos", se queja.
A margen del contenidos de estos envíos, la falta de protección es su problema principal. De hecho, UGT ya denunció a Glovo, Deliveróo, Uber Eats y Amazon el pasado 1 de abril no facilitar mascarillas, guantes y geles desinfectantes a sus trabajadores: "Pedimos que cumplan la ley. La empresa debe proporcionar equipo de protección y no lo ha hecho. Entramos en portales, tocamos timbres y estamos más expuestos que otros colectivos a la Covid 19", explica Dani Gutiérrez de Riders por Derechos.
En paralelo, varios sindicatos de riders han enviado un comunicado a dichas empresas en el que reclaman más medidas para evitar el reparto de droga, como solicitar que el remitente les muestre el contenido del paquete antes del envío o la posibilidad de negarse a efectuar el transporte si el contenido del paquete es dudoso. "Aquellos clientes que usan la plataforma para fines totalmente legales, podrán seguir usando la aplicación", aseguran los sindicatos. Esta semana se reunirán con Adigital, la asociación mediadora entre estas empresas y el Gobierno para debatir dichas medidas.
"Bájame la basura"
Al margen del contenido ilegal de los envíos, los repartidores también lamentan de la falta de empatía de algún que otro cliente. Muchos han acordado dejar el paquete frente a la puerta para evitar el contacto con el cliente, como hacen los repartidores de supermercados. Otros, en cambio, prefieren entregarlo en mano a con la esperanza de recibir una propina: "Un compañero hizo un servicio sólo para ir a comprar un diario y al entregarlo, en vez de darle propina le dieron la bolsa basura para que se la bajara", explica Nasir, indignado.
Glovo asegura soporte a sus riders frente a paquetes ilícitos
Preguntado por este diario sobre las medidas de protección de sus repartidores. la compañía asegura que si un repartidor sospecha de un uso ilícito del servicio "se pone en contacto directo con Glovo para ponerlo en conocimiento de las autoridades". Se trata de una dirección de correo electrónico de la que algunos repartidores lamentan que no reciben respuesta. Respecto a las medidas de seguridad, la compañía asegura que está repartiendo los EPIs a través de sus almacenes y que se ha adherido a la guía para el reparto seguro que han firmado restaurantes y plataformas.