Sevilla toma medidas para salvar sus negocios más emblemáticos

Una ordenanza municipal los protege frente a la expansión de grandes firmas
Se establecen las condiciones por las que se concede el distintivo 'Establecimiento emblemático de la ciudad de Sevilla'
Podrán beneficiarse de rebajas fiscales y otras ayudas
Sevilla es, sin duda, una ciudad con historia palpable en cada una de sus calles. Numerosos edificios y negocios forman parte de su tradición, llegando a convertirse en un reclamo turístico más. Así, el Ayuntamiento de Sevilla, junto con la Cámara de Comercio, han buscado la fórmula, mediante una ordenanza municipal, para que el comercio tradicional se vea respaldado y ayudado y pueda destacar frente a la oferta de ocio de la propia ciudad.
En el marco de esta iniciativa, se establecen las condiciones para acceder al distintivo "Establecimiento emblemático de la ciudad de Sevilla", una categoría que ofrecerá muchas ventajas y que congrega a numerosos negocios como tiendas, bares u hoteles, ente otros. Entre los requisitos fijados se encuentran tres. El principal es el de la antigüedad: debe ser un establecimiento que haya estado abierto durante cuarenta años sin interrupción, perteneciendo así a la memoria colectiva de los sevillanos.
Además, existen dos requisitos más, entre los que deben cumplir al menos uno: desarrollar una actividad singular o que el local donde se encuentren contenga valores patrimoniales, ya sean arquitectónicos o decorativos, en el interior o el exterior, es decir, que constituyan una seña de identidad.
La normativa, que entra en vigor este otoño, atañe a negocios emblemáticos como El Rinconcillo, el establecimiento hostelero más antiguo de Sevilla y uno de los más emblemáticos de la ciudad. Javier De Rueda, copropietario de este sevillano bar, indica que "no solo es bueno para los negocios, sino también para la ciudad ya que es la única forma de que Sevilla siga manteniendo una identidad propia". El hostelero incide en que "si esto no se hiciera, al final no habría manera de diferenciar un sitio de otro porque todo estaría copado por las grandes marcas".
Líneas de actuación
De este modo, el objetivo prioritario de esta normativa es proteger este tipo de negocios y que se conviertan en referentes del comercio local frente a la expansión de las grandes firmas y las franquicias. El segundo fin es que puedan acceder a líneas de ayudas municipales y formar parte de campañas de promoción.
La tercera línea de actuación va enfocada a mejorar la competitividad de los establecimientos emblemáticos frente a una economía cada vez más impersonal y globalizada. "Necesitamos este tipo de iniciativas y ayudas porque el centro, por ejemplo, está cada vez más despoblado y es urgente relanzar este tipo de negocios. Además, el Covid nos ha hecho mucho daño porque la gente se quedaba en sus barrios y aquí no tenemos vecinos que nos ayuden. Un negocio no puede vivir solo de fines de semana", lamenta Javier De Rueda.
En este sentido se establece el cuarto objetivo, relacionado con la reactivación económica y social de Sevilla tras la debacle sufrida por la pandemia de coronavirus. El último fin es su inclusión en el Plan Estratégico Sevilla 2030, que recoge el comercio como un sector vital para la economía y el empleo de la ciudad. También entran en este apartado los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas, que abogan por el impulso al producto local y el comercio de cercanía.
Una vez obtenido el distintivo, los propietarios de los negocios podrán usarlo para fines comerciales y publicitarios. El Ayuntamiento, por su parte, podrá incluirlos en promociones tanto de la Delegación de Economía como de Turismo, convocará ayudas al sector y podrán beneficiarse de ventajas fiscales, tales como el IBI o el ICIO. Además, tendrán la colaboración de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente para mantener los elementos de valor histórico o patrimonial que formen parte de la imagen tradicional del establecimiento. “Hace 20 años ya se venía pensando en ideas como esta que son de gran ayuda para empresarios, trabajadores y la ciudad entera”, asiente el hostelero.