Más de 3.500 sanitarios de la Comunidad Valenciana de baja o en cuarentena por coronavirus


En menos de un mes, desde Nochebuena, ha aumentado en algo más del doble los sanitarios afectados
La Conselleria de Sanitat ha ordenado que la Atención Primaria en centros de salud sea principalmente telefónica
Cada día llegan a los ambulatorios 7.000 casos sospechosos de coronavirus, el 75% da positivo
El colapso en hospitales y centros de salud de la Comunidad Valenciana provocado por el aumento de pacientes contagiados de la Covid-19 ha incrementado el riesgo al que se exponen los profesionales sanitarios, que además tienen que trabajar en condiciones penosas con exceso de estrés y de horas.
La consecuencia lógica a esta situación está siendo el incremento de médicos, enfermeras y auxiliares que están cayendo víctima del virus. Desde el inicio de la Navidad hasta el momento, el número de bajas por contagio o de profesionales en cuarentena por contactos directos se ha disparado.
Los datos hechos públicos por sanidad revelan que, a fecha de 15 de enero, 1.560 sanitarios están de baja tras dar positivo, mientras que 2.018 se encuentran en cuarentena. En total, 3.578 profesionales que no pueden acudir a trabajar, lo que supone algo más del 5% de toda la plantilla. La cifra es más del doble de los 1.532 sanitarios que se encontraban en esta situación el pasado 24 de diciembre, cuando comenzó la escalada de contagios en la Comunidad Valenciana. “La situación es muy complicada y va a ir en aumento en los próximos días, incluso semanas. A esto se une el incremento de pacientes, lo que está provocando un colapso aún mayor”, señala Víctor Pedrera, secretario general del Sindicato Médico, que cuenta a NIUS que tanto él, como el resto de compañeros liberados de sus funciones como representantes sindicales, han decidido volver a sus puestos de trabajo para atender la carga de trabajo. “Los compañeros no dan abasto para hacer frente a la situación y hemos vuelto a los hospitales y centros de salud, compaginándolo con nuestra labor sindical”, señala.
El grupo más afectado entre los profesionales sanitarios es el de las enfermeras con cerca de 800 casos. De hecho, el sindicato de enfermería, SATSE, ha hecho público un estudio que señala que en 22 días el número de enfermeras contagiadas ha aumentado un 31%, de 1.954 a 2.556 en poco más de tres semanas, mientras que se ha incrementado en un 108%, de 323 a 671, las enfermeras en cuarentena.
Ante esta situación la Conselleria de Sanitat ha llegado a un acuerdo con los sindicatos para abonar las horas extras a los profesionales sanitarios que decidan voluntariamente ampliar sus jornadas laborales para paliar el déficit existente en estos momentos, en los que las bolsas de trabajo ya están completamente agotadas.
La Atención Primaria por teléfono
La Conselleria de Sanitat ha dado orden de que ante la actual situación de colapso, la Atención Primaria se realice principalmente a través del teléfono, evitando al máximo el desplazamiento de pacientes a los centros de salud. “Entre un 15 y un 20% de los pacientes sí que tienen que acudir al ambulatorio para recibir atención directa de un sanitario. El resto se va a hacer por teléfono, como la tramitación de las bajas y altas laborales o la dispensación de recetas. De esta forma, se descongestionará el actual desbordamiento de los centros”, señala Pedrera.
Una medida que afecta también a los casos sospechosos de contagio por coronavirus. Según ha revelado sanidad, cada día llegan a los centros de salud una media de 7.000 casos de personas que creen estar infectadas, mientras que hace quince días, la media no superaba los 3.000. Además, de estos 7.000 casos duarios, el 75% son positivos, con lo que el índice de positividad se ha disparado con el avance de la tercera ola.