Castilla y León confina Burgos a partir del martes a medianoche

Las medidas, que afectarán a los más de 175.000 habitantes de la ciudad, durarán dos semanas
Se convierte así en la cuarta capital de provincia de Castilla y León con estas medidas tras el cierre de Palencia, León y Salamanca
Ya es oficial. Burgos ha decretado el confinamiento de la ciudad a partir de la medianoche del martes para hacer frente al incremento de casos de coronavirus. Así lo ha anunciado esta mañana el alcalde de la capital, Daniel de la Rosa, tras recibir la comunicación de la Consejería de Sanidad de Castilla y León.
De la Rosa ha confirmado que la decisión, que afectará a los más de 175.000 habitantes de la capital, se prolongará durante 14 días y se ha tomado después de que durante el fin de semana se haya registrado una evolución "negativa" de los casos positivos por coronavirus.
Y es que Burgos ha visto cómo en los últimos días los casos positivos se disparaban hasta superar este sábado los 500 por casos por cada 100.000 habitantes, el último de los tres criterios establecidos por Sanidad que le quedaba por cumplir.
Las nuevas restricciones prohibirán las entradas y salidas de la ciudad, salvo excepciones en los ámbitos sanitario, laboral, legal, institucional, educativo, cuidado de personas mayores o vulnerables o acciones urgentes.
Aunque De la Rosa se ha mostrado convencido de que la hostelería "no es el principal problema" en este aumento de contagios, los comercios y los establecimientos deberán reducir su aforo al 50%. Además, la hostelería deberá cerrar a las 23:00 horas, aunque no no podrán aceptar nuevos clientes desde una hora antes.
"Estamos en una situación muy similar a la del mes de marzo y abril", ha dicho el alcalde. "La única diferencia es que no hay estado de alarma".
"Los establecimientos de hostelería tienen que autoregularse para sobrevivir"
"Los establecimientos de hostelería tienen que autoregularse para sobrevivir, porque sino al final se les va a cerrar". Así de contundente se ha mostrado Fernando Sedano, el intendente jefe de la Policía Local de Burgos.
En una rueda de prensa junto al alcalde Daniel de la Rosa ha lamentado la actitud tan pasiva y permisiva de muchos establecimientos de la localidad. "El hostelero tiene que tener una responsabilidad de su público", ha asegurado Sedano en relación a las concentraciones de gente en los bares. "No necesita que esté la policía. Y si la policía tiene que intervenir, lo hará en el último minuto para resolver los incumplimientos de la minoría".
El agente ha criticado que este fin de semana se ha congregado una inmensa cantidad de personas en las calles y establecimientos hosteleros de la capital burgalesa: "Cuando la gente cree que la van a cerrar sale como si no hubiera mañana".
Aún así ha querido destacar que en esas concentraciones se ve en su mayoría a jóvenes y no a gente mayor. Sobre estos últimos ha dicho que se protegen "muchísimo más" porque han "aprendido un concepto de la supervivencia mucho más acuciada" que las personas de 15 a 29 años. Sedano también ha querido apuntar que el caso de los menores les "preocupaba muchísimo" porque "les parece un juego que la policía vaya detrás de ellos".