La carta viral de un médico malagueño: "A los que negáis la ciencia, sois la vergüenza de la profesión"


Juan Manuel Jiménez es medico de cabecera con 35 años de experiencia. Su 'Carta a los imbéciles' que niegan la pandemia, publicada en redes sociales, acumula miles de interacciones
El doctor arremete contra 'Médicos Por la Verdad' y lamenta que los colegios profesionales no alcen la voz contra el "medievalismo"
El mensaje en redes sociales de un médico de familia de Málaga se ha hecho viral. Con un título claro y directo, 'Carta a los imbéciles', Juan Manuel Jiménez Muñoz arremete contra aquellos que difunden teorías para negar la pandemia. Con 35 años de experiencia a sus espaldas, este doctor no duda en aportar sus datos y numero de colegiado. “Por si alguien me quiere denunciar o poner una querella. Será un honor”, apostilla.
De momento, lo que ha conseguido es una enorme repercusión. Son miles los internautas que aplauden sus palabras, las comparten y le dejan mensajes de apoyo. Más de cien mil interacciones acumula ya la carta publicada en su perfil de Facebook.
CARTA ABIERTA A LOS IMBÉCILES. Mi nombre es Juan Manuel Jiménez Muñoz. Soy médico de familia en Málaga. Tengo 60 años,...
Publicado por Juan Manuel Jimenez Muñoz en Miércoles, 12 de agosto de 2020
Comienza su texto el doctor Jiménez, recordando a quienes parecen haberlo olvidado que “el método científico, desde Galileo Galilei, nos ha sacado de las sombras” y que por eso “la sociedad de 2020 es completamente distinta a la de 1700”. Al método científico, continua, le debe la humanidad el contar con “herramientas para erradicar una pandemia, o para hacerla soportable: la del coronavirus, por ejemplo”.
A quienes lo obvian les recuerda que, gracias a la ciencia, hay enfermedades que se han erradicado o han dejado de ser mortales, como la viruela, la lepra, el SIDA o algunos cánceres.”Que después de 300 años de éxitos tenga uno que soportar lo insoportable, resulta estremecedor: la caída del modelo y la sustitución por la farsa, por la charlatanería, por la incultura, por el pensamiento mágico, por la vulgaridad, por el despropósito y por la democracia aplicada a la ciencia, donde el analfabeto opina sobre el coronavirus en igualdad de altavoces que el más docto catedrático de virología, y donde los tratamientos y las medidas de contención de una epidemia son a la carta”, se desahoga el doctor.
En este grupo, mete a todos aquellos que “parecen añorar la Alta Edad Media” y en el que se mezclan “terraplanistas, antivacunas, conspiranoicos, sectas satánicas, neonazis, adoradores de ovnis, hedonistas ácratas, cazadores de masones, fetichistas de los porros, delirantes con el 5G, ecologistas que no han visto jamás una gallina e imbéciles con pedigrí, pululan en todas las redes sociales instaurando una nueva religión que, mucho me temo, está calando más de lo que imaginaba en una población carente de cultura y liderazgo”.
Todo eso no es nuevo. “Tarados los hubo siempre”, se lamenta. Pero lo que realmente lo hace enfadar, como médico, es que haya compañeros de profesión “liderando imbéciles acientíficos y abjurando de la ciencia para adquirir una fama pasajera”. Algo que asegura que nunca creyó que verían sus ojos, como tampoco que “los Colegios de Médicos, o de Biólogos, giraran la cabeza hacia otra parte y no alzaran su voz contra el medievalismo”.
En este punto, acusa directamente a ese grupo de doscientos médicos que se han autodenominado 'Médicos Por la Verdad'. Un título que considera “una ofensa gravísima para el resto de los médicos que ejercemos en España, que somos 160.000. Porque quiere decir, ni más ni menos, que los 159.800 médicos restantes que no estamos en la secta somos ‘Médicos Por la Mentira’”.
"Compañeros médicos, biólogos, abogados, farmacéuticos y licenciados de toda clase y condición que habéis optado por llevarnos otra vez a la Edad Media: sois la vergüenza de la profesión, y no sois dignos de que os llamemos compañeros, y mucho menos científicos. Sois pocos, pero metéis mucho ruido y confundís", señala Jiménez.
El mensaje final de este médico malagueño, de 60 años, es tajante. " A ver si tenéis cojones para meteros conmigo. Cojones, digo; ya que neuronas… las justitas".