Cataluña ya tiene fecha para empezar la desescalada: el 23 de noviembre


Las primeras actividades que se retomarán serán las al aire libre, incluyendo las terrazas de los bares
El Govern avisa que el toque de queda nocturno se mantendrá "bastante tiempo"
La Generalitat de Cataluña trabaja para iniciar la desescalada el próximo 23 de noviembre. Después de casi un mes con medidas restrictivas, Salut ha fijado por primera vez una fecha como horizonte para empezar a flexibilizar las restricciones actuales. El objetivo es reanudar progresivamente todas las actividades paralizadas, siempre y cuando las cifras epidemiológicas sea favorables.
La desescalada empezará con la apertura de los servicios al aire libre, incluyendo las terrazas de los bares, la práctica de deporte de base y las extraescolares al aire libre como el fútbol. El resto de casos se estudiarán uno a uno. "Nuestro compromiso es que el día 23, sean cuales sean los indicadores sanitarios, que creemos serán buenos, retomaremos toda la actividad al aire libre", aseguró en la rueda de prensa el conseller de Interior, Miquel Sàmper.
Las actividades al aire libre, las primeras en reanudarse
Las restricciones de movilidad serán las que más costará eliminar. Según Samper, "las restricciones que durarán más serán las estructurales, las de cambio de hábitos. El toque de queda nocturno, que afecta relativamente poco, se quedará bastante tiempo". En cambio, el confinamiento municipial de fin de semana sí que se revisará el 23 de noviembre y se podría ampliar a la comarca, a la región sanitaria o incluso a la provincia.
Desde el Govern aseguran que no se hará una desescalada de golpe, que se tomarán decisiones de forma progresiva y se trabajará conjuntamente con los sectores afectados. El objetivo es evitar una tercera oleada, por eso, destacan la necesidad de actuar con prudencia: "no queremos desviarnos del camino correcto de bajada, necesitamos todavía 10 días para que sigan mejorando los indicadores", añadió la consellera de Salut, Alba Vergés.
"El plan tiene que hacer compatible reabrir sectores a la vez que controlamos el riesgo de rebrote. Ya no es solo reabrirlos sino mantenerlos abiertos en un contexto de pandemia"
El propósito de las autoridades sanitarias catalanas es diseñar un plan de desescalada que se adapte al contexto de pandemia en el que vivimos. "Ese plan tiene que hacer compatible reabrir sectores a la vez que controlamos el riesgo de rebrote epidémico. Ya no es solo reabrirlos sino mantenerlos abiertos en un contexto de pandemia que no cambiará en los próximos meses. Por eso, es muy importante la participación de todos estos sectores en el plan de desescalada", ha explicado Marc Ramentol, secretario general de Salud.
Por su parte, el secretario de Salut Pública, Josep María Argimon, confía en que durante estos próximos 10 días la situación mejorará y se podrá iniciar la desescalada como se espera. "No estamos bien ahora, pero vamos en la dirección correcta", asegura Argimon.
38 días con las persianas bajadas
Por el momento, hasta el 23 de noviembre, en Cataluña siguen vigentes las medidas adoptadas hace 15 días: el cierre de bares, restaurantes, establecimientos deportivos y culturales, la limitación de aforo, el confinamiento municipal de finde semana, el confinamiento perimetral y el toque de queda. El PROCICAT aprobó este jueves alargar todas estas medidas y únicamente se han librado los centros de estética, que podrán reabrir sus puertas con cita previa.
Uno de los sectores que, de momento, todavía no podrá volver a la normalidad es el deportivo. El gobierno catalán plantea una reapertura de forma progresiva de las instalaciones y equipamientos a partir del 23 de noviembre. Sin embargo, según los responsables de Salut, lo primero que se reanudarán serán "las actividades deportivas al aire libre ya que suponen un menor riesgo". Esto implica que gimnasios y polideportivos podrían tardar en reanudar la actividad. Por ello, la Generalitat ha anunciado que ampliarán hasta 25 millones las ayudas.