Cataluña suspende los ingresos, visitas y salidas de corta duración en residencias de seis zonas


A pesar de que los datos muestran "una situación de control" la medida se aplica para minimizar el riesgo de infección en los grupos más vulnerables
Los ingresos, visitas y salidas de corta duración a residencias y centros de atención a personas con pluridiscapacidades quedan suspendidas en las comarcas del Montsià, Baix Ebre y Ribera d'Ebre (Tarragona) y de las localidades de Ripollet, Terrassa y Sabadell (Barcelona). Así lo ha comunicado la Consellería de Salut de la Generalitat de Cataluña este miércoles.
Según ha informado el departamento, los datos "muestran una situación de control epidemioplógico", por lo que las medidas se toman para minimizar el riesgo de infección en los grupos más vulnerables.
El comunicado explica que en las últimas semanas se han detectado, confirmado y notificado diversos brotes de coronavirus en diferentes municipios o territorios de Cataluña, un porcentaje "importante" de los casos se han encontrado a partir de la búsqueda activa de brotes activos y corresponden a personas asintomáticas.
Aunque los datos de gran parte de la comunidad muestran una situación de control epidemiológico, teniendo en cuenta la movilidad interna laboral y social de los habitantes, y con el objetivo de minimizar el riesgo de infección en los grupos de población más vulnerables, "se considera necesario aplicar medidas especiales de protección en determinados centros sociales".
Permitidas las salidas superiores a tres semanas
Hasta nuevo aviso solamente se autorizan las salidas superiores a tres semanas, que a la vuelta requerirán de la aplicación de medidas de protección como si se tratara de nuevos ingresos: prueba PCR y aislamiento de 14 días.
Estas salidas, acordadas con los familiares, requerirán de la firma de un documento de declaración responsable del residente o del familiar que se haga cargo, y estas personas serán informadas de las medidas de protección que deben seguir durante el periodo con el objetivo de proteger a la persona residente.
De todos modos, queda a la consideración de la dirección de cada centro la posibilidad de permitir salidas de corta duración en casos excepcionales, acompañados de cuidadores y personal de los centros residenciales. Asimismo, se puede permitir las visitas en casos de urgencia o necesidad justificada, siempre preservando el derecho al acompañamiento al final de la vida, y siempre con medidas de protección.
En los centros residenciales se crearán unidades de convivencia estables de entre 15 y 20 residentes, con separación entre ellas, para el desarrollo de actividades grupales y salidas a equipamientos exteriores.
A su vez, quedan suspendidas las actividades de los centros de día de ancianos, "sin perjuicio que se pueda valorar la atención a casos específicos si tienen necesidades sociales especiales", y son medidas que se podrán adaptar según la situación y las características de cada residencia, en función de las indicaciones de la autoridad sanitaria.