Cataluña endurece las restricciones y vuelve al confinamiento comarcal previo a Semana Santa


La movilidad entre comarcas deja de estar permitida también para convivientes si no es por motivos de fuerza mayor o necesidad hasta el 19 de abril
Tras cuatro días de "incremento intenso" en la ocupación hospitalaria, Salut e Interior piden "un último ejercicio de empatía que no durará más de dos meses"
Las UCI catalanas se sitúan al 37% de su ocupación, la cifra más alta de España, solo superada por Melilla: "Es insostenible"
Cataluña vuelve a restringir su movilidad a los límites de la comarca. El Govern de la Generalitat ha aprobado volver al confinamiento comarcal previo a Semana Santa a partir del viernes 9 de abril para atajar el aumento sostenido de los indicadores de la pandemia, según han anunciado la consellera de Salut, Alba Vergés, y el de Interior, Miquel Sàmper.
Lo han hecho en rueda de prensa a las 18h de este 7 de abril tras la reunión del Procicat, que ha valorado la necesidad de dar marcha atrás en la relajación de las medidas. "Sabemos que es difícil para todos y sobre todo para centros sanitarios que ven cómo entran casos graves" en palabras de Vergés, que ha insistido en que "esta situación es diferente a la de anteriores olas porque el crecimiento no se corresponde al número de casos sino al número de hospitalizaciones, no asumible para los centros sanitarios".
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Las restricciones actuales, adoptadas el 15 de marzo y prorrogadas por Semana Santa, permiten a las burbujas de convivencia desplazarse entre comarcas. Un 'respiro' al que la consellería ha decidido poner fin a pesar de que hay "dos pandemias: la de la covid-19 y la fatiga pandémica", según la titular de Salut. En este sentido, ha defendido buscar "el mejor equilibrio, tomando medidas solo cuando los datos obligan a ello".
No obstante, ahora los convivientes dejarán de poder romper el confinamiento comarcal y los motivos para hacerlo volverán a ser los de fuerza mayor o necesidad, como los derivados del trabajo, la asistencia a centros educativos, el cuidado de personas dependientes o la vuelta al domicilio habitual, entre otros.
📡 #HC @albaverges: 'Continuem revisant les dades dia a dia per veure com és aquesta tendència de casos i anar acurant al màxim les mesures. Portem més d'1.5M de vacunes posades, és un esforç que està fent el sistema de salut i que els professionals han de poder seguir fent' pic.twitter.com/laCEAZ9qm7
— Salut (@salutcat) 7 de abril de 2021
Cuatro días de "incremento intenso"
"Después de cuatro días de incremento intenso, debemos comenzar a tomar medidas", según el secretari de Salut Pública, Josep Maria Argimon: "El número de pacientes en UCI está aumentando y de forma preocupante". Argimon se ha referido también a este paso atrás: "Queremos dar pasos adelante y es verdad que hay veces que damos pasos adelante y pasos atrás, pero pensemos que, tal y como está toda Europa, hace meses que la situación es crítica y que pasos adelante han dado pocos".
La vuelta al confinamiento comarcal previo a Semana Santa estará vigente hasta el 19 de abril, aunque Salut revisará los próximos días los datos epidemiológicos para decidir si aumenta las restricciones o las mantiene.
Un último ejercicio de "empatía" que no durará "más de dos meses"
El conseller de Interior, Miquel Sàmper, también ha comparecido para recoger el concepto lanzado por Vergés: "Entramos en la cuarta ola y sabemos que es duro, la fatiga pandémica cada vez cansa más y debemos empatizar con la población".
No obstante, Sàmper ha pedido a los catalanes "un último ejercicio de empatía" que, según ha estimado, "no durará más de dos meses". De hecho, ha asegurado ser "optimista" porque el ritmo de vacunación permitirá que "todos los grupos vulnerables estén vacunados" y por la llegada del buen tiempo, que trasladará muchas de las actividades a espacios exteriores.
Frente a la cuarta ola
El propio secretari de Salut Pública ya alertó este martes que la situación de las UCI catalanas es insostenible ante una cuarta ola: "Vamos a un ritmo que no podemos sostener". De hecho, las camas de críticos de los hospitales de la comunidad se sitúan al 37% de su ocupación, la cifra más alta de España, tan solo superada por Melilla.
Según la última actualización del Departament de Salut, hay 458 pacientes ingresados en UCI y 1.712 en planta. Es lo que preocupa a las autoridades sanitarias, ya que los hospitales se encuentran demasiado tensionados ya que tienen una mayor ocupación ahora que cuando empezó la tercera ola.
Asimismo, tras varios días festivos, los servicios epidemiológicos han vuelto a diagnosticar en torno a 1.700 casos de covid-19 por PCR, aunque el riesgo de rebrote y la velocidad de transmisión se han reducido el mismo día que han informado de la defunción de 30 personas por la infección.