En el corazón de la UCI de Valdecilla: "Tenemos pacientes de 24, 36 o 37 años, es muy duro"

La única unidad de críticos de Cantabria, que se mantiene con una ocupación del 30%, ha visto cómo los ingresos se disparaban el pasado fin de semana
"De momento tenemos recursos, pero esto no es infinito", dice Isabel, una de las enfermeras que aquí trabaja
Isabel Ibáñez tardará en olvidar lo "caótica" y "triste" que ha sido su última guardia. Fue el pasado fin de semana en la UCI del Hospital de Valdecilla. Esta joven enfermera vio cómo esa noche tuvieron que intubar a ocho personas mientras que, en sólo tres horas, otros seis pacientes fueron ingresados en estado crítico.
"Es un goteo constante de ingresos, no sabría decir dónde está el pico de la ola", se lamenta esta sanitaria, que además destaca que esos ingresos vistos en los últimos días se dan en personas de todas las edades, y no sólo en pacientes de 70 ó 80 años. "Hemos tenido a un chico de 24 años", recuerda. "Esto no es una broma, afecta a todo el mundo".
En el interior de la UCI las enfermeras y sus auxiliares se pintan su nombre en la parte de la trasera de los EPI junto al dibujo de un animal para que a los pacientes les sea más fácil reconocerles y así sientan que tienen a alguien cercano junto a ellos. Porque una de las cosas más duras que Isabel ha vivido en la UCI de este hospital cántabro es la soledad de los pacientes. "Es muy duro tener que decirle a una persona que la vamos a dormir para ponerle un tubo y que esa persona no tenga a nadie de su familia en la que apoyarse".
Y recuerda especialmente el caso del chico de 24 años y de lo "triste" que fue dar la noticia de su intubación tanto a él como su familia: "No sabes cómo intentar tranquilizarle. Por mucho que tú le cuentes que todo va a ir bien es muy duro tener que verles en esas circunstancias".
"La situación sigue siendo la misma, pero más triste"
Durante la primera ola de coronavirus esta enfermera se encontraba en la UCI "limpia" del centro santanderino. Por aquel entonces el coronavirus nos pilló a todos de sorpresa y la presión fue "agobiante para todos". Ahora, tras haber pasado cuatro meses en la unidad de críticos con Covid-19, Isabel confiesa que la situación "sigue siendo la misma, pero más triste". "Por mucho que hagas tu trabajo y que estés ahí al pie del cañón ves que algo se te escapa porque siguen llegando pacientes y no lo puedes frenar", se lamenta.
Aunque la UCI del Hospital de Valdecilla se mantiene estable con un 30% de ocupación, a Isabel le preocupa saber hasta cuándo podrán seguir capeando el temporal. "De momento tenemos recursos, pero esto no es infinito", dice. "No sabemos hasta cuándo podremos soportar esta presión asistencial y esta carga".
Para que la presión no vaya a más a esta sanitaria pide a los ciudadanos un último esfuerzo: "Que colaboremos con la parte que nos toca. Que nos quedemos en casa y limitemos al máximo los movimientos porque esto afecta a todos".
Pero aunque Isabel achaque el cansancio, tanto físico como psicológico, de este último año y sienta una gran "incertidumbre" por saber cómo evolucionará el virus, tiene claro que vive por y para su profesión. "Hoy es el Covid-19, pero hace años fue la gripe A", recuerda. "Cuando uno decide ser sanitario sabe a lo que se enfrenta".
MÁS
Uno de cada cuatro casos que se detectan en Cantabria corresponde a la variante británica
El Hospital de Valdecilla amplía su UCI ante el avance de la tercera ola: "La semana que viene va a ser difícil"
Críticas por las "masificaciones" y largas colas para vacunar a sanitarios en el Hospital de Valdecilla