Los oasis libres de covid de Granada, la provincia con mayor incidencia de contagios de España


Cuatro municipios de Granada mantienen, a día de hoy, cero contagios entre sus vecinos desde que estalló la pandemia del coronavirus
Todos ellos pertenecen a la comarca de la Alpujarra granadina
Factores comunes como el entorno rural o la despoblación contribuyen a que estos rincones aún no hayan conocido el virus
“Entramos en los 15 días decisivos para salvar la Navidad”. Así de tajante se manifestaba este mismo martes Elías Bendodo, Consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, en referencia a la estabilización de la curva de contagios y hospitalizaciones que se vislumbra en su comunidad autónoma. El mes de noviembre ha sido un mes aciago en el que Andalucía ha alcanzado su pico de ingresados en los hospitales por coronavirus, manifestando la enfermedad su peor cara en Granada, donde la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes llegó a superar incluso los 1.000 contagios. Sin embargo, allí donde la Covid-19 ha llevado al límite a los hospitales, existen aún cuatro pueblos que no conocen ni un solo contagio desde que estalló la pandemia. Cuatro oasis hechos ‘a medida’ para evitar que el virus se expandiera entre sus vecinos.
Lobras, Juviles, Carataunas y Cástaras. Estos son los cuatro municipios granadinos libres de coronavirus a día de hoy. Cuatro municipios que no han registrado un solo contagio desde que se declarara oficialmente la pandemia. Y todos ellos comparten una serie de factores sociales y geográficos que han propiciado que, a día de hoy, sean un lugar seguro frente a la pandemia. Sus cuatro alcaldes y alcaldesas coinciden en que no hay secreto para resistir al coronavirus: el entorno rural, el aire fresco, la despoblación y unos vecinos con una media de edad avanzada tienen la clave.

“Somos un pueblo pequeño, en el que la gente es ya mayor y se mueve muy poco”, señala María Lourdes Molina, alcaldesa de Juviles. Con sus 150 habitantes censados, 110 reales según la regidora, este pequeño municipio de la Alpujarra granadina constituye uno de estos oasis para alejarse de la pandemia. A pesar de las restricciones impuestas en Andalucía, donde continúa vigente el cierre perimetral de todos los municipios, Juviles recibió el pasado Puente de Todos los Santos numerosos visitantes que pusieron en jaque este hito. “El pueblo se llenó de jóvenes que volvieron con sus familias, tuvimos que cerrar piscinas y parques y vigilar botellones”, asegura Molina, quien se temió lo peor con “ese puente dichoso”. Semanas después, su pueblo continúa con el contador a cero, y ya respira de nuevo aliviada: “Dentro de lo que cabe, los jóvenes también se portaron bien aquellos días”.

Lobras colinda con Juviles, menos de diez kilómetros separan sus centros urbanos. Su alcaldesa, Francisca Martín, se sincera con NIUS cuando confirma que, un día más, ninguno de sus 150 vecinos registra contagios: “Ni nosotros nos lo creemos”. Lo cierto es que tanto ella como los alcaldes de los otros tres municipios han tomado todas las precauciones que estaban en su mano: “Hemos suministrado mascarillas gratuitas, geles e incluso la compra para las personas mayores, además de desinfectar las calles con asiduidad”, asegura la alcaldesa de Lobras, ubicado igualmente en la vertiente sur de la Alpujarra granadina. También, confiesa, pidió a los vecinos que comunicaran a sus familiares que “no vinieran en los puentes ni los fines de semana”. Se han blindado en la medida de lo posible para que su población, también envejecida, no sufriera las consecuencias de un posible contagio: “Serán los aires de la Alpujarra”.

Y a otros ocho kilómetros por carretera de Lobras llegamos a Cástaras, el municipio más poblado de estos cuatro con sus 260 habitantes. A pesar de tener más vecinos, la falta de movilidad social en sus calles ha contrarrestado un mayor riesgo de contagio. “Somos todos pueblos muy pequeños en los que nuestros vecinos, ya mayores, salen lo menos posible de casa”, afirma María Yolanda Cervilla, alcaldesa de Cástaras. Cervilla cree firmemente que el entorno rural en el que se ubican estos municipios favorece un entorno seguro: aire fresco, naturaleza y espacio donde esparcirse y no aglomerarse. Pero lo más determinante, asegura la regidora, es “la concienciación de nuestros vecinos”, y la labor de prevención del consistorio, que al igual que en los otros tres pueblos, han hecho acopio de EPIS para repartirlo asiduamente entre los vecinos.

El último de estos oasis es Carataunas, que aunque no lo parezca, se sitúa más cerca de Granada que de Atenas: concretamente a sólo 60 kilómetros de la capital con más tasa de contagios de España. Por allí tampoco ha pasado la Covid-19, ni siquiera de paso, que sepamos. “El pasado puente aquí también vino gente, pero prohibí cualquier tipo de actividad deportiva o cultural para evitar aglomeraciones en las calles”, afirma, orgulloso de su labor, Diego Fernández, el regidor de Carataunas. Un pueblo de 194 vecinos censados con una media de edad, de nuevo, avanzada, y donde no pueden salir ni a hacer la compra. No por miedo, sino porque no hay dónde hacerlo: “No tenemos comercios, supermercados ni bares. Los vecinos cogen el autobús o van en coche a Órgiva, pueblo vecino, para hacer las compras”, afirma a NIUS el alcalde. Ese era uno de los principales focos de contagio para sus vecinos, junto con los comerciantes ambulantes que, por razones obvias, acuden a diario a Carataunas: “Les pedí a los vecinos que tuvieran mucho cuidado haciendo las compras y evitaran aglomeraciones”, declara Diego Fernández.

Lobras, Juviles, Carataunas y Cástaras. Todos tienen en común algo: suman cero contagios entre todos en lo que llevamos de pandemia. Y parecen claros los factores que lo ha hecho posible, además de la "suerte" a la que achacan también los ediles a esta circunstancia.
- Despoblación: pocos habitantes y muy dispersos
- Población envejecida: más precavidos, no salen prácticamente de casa
- Entorno rural: en el día a día no hay movimiento de turistas en el pueblo, aunque en fechas festivas son un destino preferente para el turismo rural
- Naturaleza: el aire de la Alpujarra, aseguran, mantiene el coronavirus alejado
Todos ellos son el mejor ejemplo del contenido avance de la pandemia en la comarca de la costa de Granada, donde la Junta de Andalucía, a tenor de los datos, ha abierto un poco el grifo. Mientras en el resto de la provincia se ha decretado el cierre de todos los servicios no esenciales de forma permanente, el Distrito Sur de Granada, el que se ubica en la costa y alrededores, ya puede volver a operar sus comercios no esenciales hasta las seis de la tarde.