Dientes rotos, dolor mandibular y bruxismo: la boca también sufre el estrés generado por la pandemia


Las clínicas odontológicas registran un incremento significativo de pacientes con problemas dentales provocados por la ansiedad y los nervios
Los dentistas recomiendan acudir a la consulta cuando aparezca dolor de dientes, encías o incluso de cabeza para evitar daños mayores
Una simple férula de descarga colocada a tiempo permite relajar la articulación de la mandíbula y proteger los dientes
El estrés y la ansiedad generados por el miedo y la incertidumbre provocados por la pandemia de coronavirus está teniendo graves consecuencias en nuestra boca. Así lo alertan desde el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Murcia que aseguran que se están detectando en las clínicas dentales de nuestro país y en todo el mundo, un incremento significativo de pacientes que llegan a las consultas con bruxismo, dientes rotos y dolores de mandíbula. “Como consecuencia de la tensión aparece el bruxismo y apoyamos los dientes unos contra otros con cierta intensidad. Esto provoca que los dientes comiencen a quejarse, aparece la sensibilidad dental, el dolor de encías y en los casos más graves se producen roturas de muelas, de dientes o de empastes, reconstrucciones e incluso de coronas”, explica Pedro Caballero, presidente de los odontólogos murcianos.
La boca puede ser el reflejo de nuestro estado anímico y una de las vías a través de la cual liberar los nervios acumulados a lo largo de los días y los meses de pandemia. Es por las noches principalmente, mientras dormimos, cuando apretamos y chirriamos los dientes de forma involuntaria. “Esto hace que se vaya acumulando tensión en la articulación temporomandibular, que une la mandíbula con el cráneo, y también ocurre por el día, mientras trabajamos o conducimos”, señala Caballero

Uno primera alerta a la que debemos de estar atentos antes de que se produzcan males mayores es un intenso dolor de mandíbula, principalmente en la zona cercana al oído, cuando despertamos por las mañanas y también la aparición de dolores de cabeza. “En cuanto notemos uno de estos síntomas es importante acudir al dentista. Desde que empezó la pandemia hemos dejado de lado las revisiones periódicas y éstas son muy importantes para detectar a tiempo un incipiente desgaste de dientes o una grieta. De esta forma podemos atajar estos problemas antes de que se agraven”, asegura el presidente del Colegio de Odontólogos de Murcia.
El teletrabajo también afecta a nuestra salud bucal
Con el estallido de la pandemia, miles de empleados han tenido que trasladar su oficina a casa, donde no contamos con mesas adecuadas para trabajar o sillas que permitan mantener una posición adecuada durante las numerosas horas que pasamos frente a la pantalla del ordenador. “Nos hemos puesto a trabajar en el salón con las sillas y las mesas para comer o en las cocinas en banquetas y esto genera una mala postura que afecta a los músculos del cuello y que finalmente desemboca en tensión en la articulación temporomandibular que he comentado antes”, explica Caballero.
El bruxismo en niños
La pandemia de coronavirus está disparando los casos de estrés y ansiedad en los niños y como consecuencia los problemas bucales también pueden aparecer en los más pequeños.
Los casos de bruxismo en los niños suelen ser un mecanismo fisiológico natural que sirve para preparar la boca y hacer espacio para los dientes y muelas que están por venir. Sin embargo, también hay un bruxismo patológico que aparece como por la ansiedad y el estrés, y la situación actual también puede afectar a los menores. “Puede haber casos, pero en menor medida que en adultos. Por un lado, los niños se adaptan mejor a todas las situaciones y les afectan menos y por otro, hay una razón fisiológica, ya que los músculos de la mandíbula están menos desarrollados y pueden ejercer menos fuerza”, según Pedro Caballero.
Colocar una férula de descarga
Para evitar esta tensión en mandíbula, los odontólogos recomiendan colocarse una férula de descarga, que mantiene la articulación en una posición neutra, descarga la articulación mandibular y protege los dientes de la tensión. “No vale cualquier férula de esas que se pueden encontrar por internet. Es importante utilizar una férula bien equilibrada y ajustada a cada persona por un odontólogo”, afirma Caballero.
Lo habitual es utilizar estas férulas durante la noche, mientras dormimos. Aunque también es recomendable usarla durante el día. “Si estamos muy tensos por ejemplo cuando teletrabajamos es un buen momento para usarla para relajar la tensión en la boca”, asegura Pedro Caballero.