Ciro Cabal, el investigador que no consiguió ni una beca en España y que ahora es portada de Science

El biólogo se fue hace cuatro años de España porque no lograba ninguna ayuda para hacer su tesis doctoral
Fue aceptado por la Universidad de Princeton, una de las más prestigiosas del mundo
Su trabajo sobre la competición de las raíces de las plantas es portada de la revista Science
El caso de Ciro Cabal (Madrid, 1984) ya salía en los informativos hace cuatro años. El suyo era un ejemplo más de cómo el talento se iba de una España incapaz de dar cabida a la comunidad científica emergente. Hoy Ciro vuelve a ser noticia. Esta vez porque su investigación ha conseguido ser portada de la revista Science, la publicación científica más prestigiosa del mundo. Eso sin haber terminado todavía el doctorado.
Durante años, el biólogo trabajó de camarero mientras intentaba por todos los medios dedicarse a la investigación en España. No hubo suerte y Ciro Cabal decidió probar en el extranjero. Lo hizo en la universidad que cuenta con uno de los mejores departamentos de ecología del mundo: la Universidad de Princeton (EE.UU.), que le acogió con las puertas abiertas y todas las facilidades que no había tenido en España.
Así que allí se fue, empujado por las circunstancias y con la determinación de que un día volvería a casa, asegura a NIUS. Ha sido el SARS-CoV-2 el que le ha traído antes de tiempo. Una pandemia que, vaticina, es solo "el primer síntoma global de una crisis mucho peor: la crisis ecológica". Su estudio sobre la competición de las raíces de las plantas, publicado en la portada de la revista Science, puede ayudar a combatirlo.
Pregunta: ¿Cómo ve la situación de la ciencia en España, ha cambiado algo para los investigadores noveles?
Respuesta: De los autores del estudio que ha sido publicado en la portada de Science, tres somos científicos españoles que nos encontramos investigando fuera de nuestro país. En Estados Unidos, en Escocia y en Brasil. Los científicos españoles tienen muy buena fama en el extranjero, lo que ocurre es que en España no hay cabida. Ahora que la gente se preocupa un poco más por la ciencia a raíz de la covid-19, quizás la cosa cambie y se aumente la inversión. Por lo menos ahora hay un Ministerio de Ciencia. Toda una declaración de intenciones que todavía no se ha traducido en nada tangible. Aunque yo intento ser optimista.
P: Cuando termine el doctorado en Princeton ¿qué va a hacer?
R: Mi deseo es volver a España para seguir dedicándome a la investigación y a la docencia, pero no sé si lo lograré. Espero que mi paso por Princeton y el impacto de la portada en Science me abra puertas, aunque tampoco estoy seguro de ello porque el problema en España no es solo la precariedad laboral y la falta de inversión. Como dice un colega mío, también pesan la burocracia universitaria y el enchufismo. Eso tiene que cambiar para dar cabida al talento y no a los amigos.
P: El SARS-CoV-2 le ha devuelto a España antes de tiempo, ¿cuándo va a regresar a New Jersey a terminar su tesis?
R: Cuando cerraron la universidad, decidí volver a España y seguir trabajando desde aquí, aunque tendré que ir en enero o febrero para terminar mi doctorado. Después de ello, la historia está por escribir.
P: ¿Cómo ha conseguido un doctorando rechazado en España ser portada de Science?
R: Bueno, tengo un jefe en la Universidad de Princeton, un director de doctorado, que es una eminencia. Lo que hemos hecho es un estudio ecofisiológico sobre la competencia entre plantas a través de las raíces por los recursos del suelo. Para ello hemos utilizado modelos matemáticos capaces de predecir la respuesta de las plantas, cómo cambia su crecimiento en presencia de otras con raíces competidoras. Hasta ahora había controversia al respecto, ya que había teorías encontradas. Nuestro modelo demuestra que cuanto más cerca están, más raíces generan, pero menos eficientes son. Se trata de una teoría innovadora que resuelve una controversia y que empíricamente es muy visual ya que logramos teñir las raíces de colores para mostrar nuestro estudio.
P: ¿Qué aplicaciones tiene lo que han descubierto?
R: La virología se está enfrentando a la peor crisis de la humanidad, pero esta es solo el primer síntoma de una crisis mayor que es la crisis ecológica. Esta vez la gente se va a vacunar y se acabará el problema. Lo que está por venir es mucho más grande y no solo por el número de muertes, sino porque la crisis va a ser crónica. Va a suponer limitaciones al suministro de agua, de alimentos, migraciones masivas por la falta de estos recursos… En todo esto, la investigación tiene mucho que decir y también la vegetación y las plantas ya que son grandes sumideros de CO2 en la tierra. Su respuesta y su comportamiento sirven para hacer predicciones y ver cómo va a ser el mundo en el futuro.
P: Dice que la peor crisis a la que se va a enfrentar la humanidad está por llegar.
R: Sí, hay bastantes evidencias que esta crisis de la covid-19 es el primer síntoma global de una crisis ecológica. Está estudiado que en ecosistemas con baja biodiversidad hay muchas más epidemias. La probabilidad de contagio es mucho más elevada y es muchísimo más probable que esa epidemia pase al ser humano. A nivel local, llevamos tiempo viviendo grandes desastres como huracanes en el Atlántico o tormentas tropicales en el Mediterráneo a las que ya hasta ponemos nombre y antes no ocurrían. Ahora, la crisis afecta a todo el mundo. Es el primer síntoma global de la crisis ecológica que se avecina.