Las listas de espera se disparan en Cataluña por la covid: "De uno a cinco años para operarme del pie"

El Clínic alerta de un aumento de ingresos de infectados con complicaciones y el del Mar ha cerrado dos quirófanos
Los hospitales catalanes atienden a 2.788 pacientes ingresados en planta y a 590 en camas de UCI
María del Mar lleva esperando nueve meses a que le operen del pie y su cojera empeora con el paso del tiempo
De uno a cinco años. Es lo que tiene que esperar María del Mar para que le operen de una lesión que sufre en el pie que le provoca cojera y que le está causando complicaciones. "Llevo unos nueve meses que debía operarme de unos huesos rotos", explica esta afectada por la desprogramación de operaciones, que lamenta: "La doctora me dijo que habían estado mucho tiempo sin operar por la covid-19 y que tenía una inmensa lista de espera".
"Me parece incoherente", critica al pensar en la necesidad que tiene de operarse cuanto antes pero no ver una fecha en el horizonte. "De caminar mal, el cuerpo coge vicios que no son naturales y salen complicaciones: ahora me ha salido un bulto de líquido en la rodilla y tengo que operarme cuanto antes antes de que todo esto me afecte a la cadera", concluye.
El de María del Mar es un ejemplo de lo que supone la desprogramación de intervenciones debido a la presión asistencial que sufren los hospitales, acentuada en la tercera ola de la pandemia en Cataluña. La comunidad acoge a 2.788 pacientes ingresados en planta y a 590 infectados graves en camas de UCI. De hecho, algunos de los principales hospitales de Barcelona ya se han visto obligados a aplazar cirugías no urgentes.

El Hospital Clínic ha comenzado a hacerlo tras acusar un aumento de ingresos de pacientes infectados de covid-19 con complicaciones. También el Hospital del Mar, que además ha debido cerrar dos quirófanos para aprovechar el espacio de las salas de reanimación y que las ocupen enfermos de coronavirus. No obstante, fuentes de este centro consideran que todavía tiene "margen" gracias a la apertura de un nuevo edificio en el que podrá atender a más pacientes.
"Se nota que estamos inmersos en la tercera ola, nuestra UCI está colapsada", lamenta un técnico de ambulancias en el Hospital Moisès Broggi de Sant Joan Despí. "Su ocupación es de 18 camas habitualmente y, a día de hoy, es de 27", explica con cierto miedo. No obstante, este sanitario confía en haber aprendido de la experiencia de la primera y segunda ola: "Sabemos a lo que nos enfrentamos".
Asimismo, la presión asistencial golpeará al Hospital de Sant Pau en los próximos días. Por el momento, no está desprogramando intervenciones, pero sus responsables prevén hacerlo si las cifras de ingresos siguen su tendencia al alza; ya lo hicieron la semana pasada. Por su parte, el hospital más grande de Barcelona, el Vall d'Hebron, tampoco ha suspendido cirugías y, además, cuentan con disponer pronto, aún sin fecha concreta, de un nuevo hospital polivalente con camas de UCI.